El central brasileño Marinho Dos Santos Junior jugará en Soria su cuarta temporada después de comprometer su renovación con el Río Duero Soria. El jugador se ha ganado la confianza de Alberto Toribio aprovechando el intenso trabajo diario de la pasada campaña, lo que le permitió sumar sus mejores números para convertirse en el central que más aportó a nivel estadístico. Además, su permanencia se antoja muy relevante por su madurez y experiencia, fundamental en un plantel tan joven como el soriano.
Tras la salida de Igor Iuri Silva y de Juan Francisco Frías, a los que el club agradece su compromiso y les desea suerte de cara al futuro, Dos Santos tendrá que asumir la responsabilidad de aportar experiencia y veteranía en el centro de la red. Algo que no parece pesar en el jugador carioca, puesto que el curso pasado firmó unas estadísticas notables, las mejores desde su llegada a Soria. De hecho, si cerró 2021 con 135 puntos en 82 parciales, el 2022 le permitió brillar con 192 puntos en 75 mangas. Entre las facetas en las que también brindó una grata mejoría fueron en el saque, mostrando versatilidad en los golpeos, así como en el bloqueo, siendo el mejor jugador de la plantilla en esta faceta con 0,75 puntos por set.
Su gran temporada no quedo sin recompensa honorífica por parte de la Real Federación Española de Voleibol, logrando entrar en el septeto ideal de la jornada hasta en cuatro ocasiones. Y eso que, lamentablemente, cuando se llegaba a la recta final de la competición y el estado de forma del brasileño era más que sobresaliente, llegó una inoportuna lesión en el brazo que le impidió participar en los partidos definitivos. Algo de lo que, afortunadamente, parece totalmente recuperado.
Dos Santos Junior, se muestra contento de seguir un año más en Río Duero Soria. Demostrando su madurez, considera que no es momento todavía para fijar objetivos de cara a la temporada, mientras que hay mucho trabajo por delante para acoplar las nuevas unidades de juego. Por eso, cree que primero hay que centrarse en el primer encuentro de la competición, para, a partir de ahí, ir partido a partido y poder decir los objetivos. Por su parte, quiere aportar su granito de arena para volver a ser un equipo “sólido” que vaya al unísono en una única dirección.
