“En los últimos diez días el varapalo que ha sufrido nuestra Zona Básica de Salud está resultando demoledor”. De este modo se manifestaban esta misma tarde de martes 3 de noviembre los vecinos de Pinares contra los recortes que se están viviendo en la zona de Salud que contempla los pueblos de Covaleda, Duruelo de la Sierra, Salduero, Molinos de Duero, Montenegro y Vinuesa. Tras perder hace unos días a una de las médicas de familia de Duruelo, ahora sin aviso alguno y sin saber si se sustituirá o no, Pinares Norte se ha quedado sin servicio de pediatría que tenía lugar dos veces por semana.
Rodeados de carritos de bebés vacíos, como seña del desamparo en el que quedan cientos de niños de esta zona, los Ayuntamientos Duruelo de la Sierra, Covaleda, Salduero, Molinos de Duero, Montenegro y Vinuesa, han mostrado su total disconformidad con las decisiones que está adoptando la Junta de Castilla y León para la que ha definido como “reorganización” del personal Sanitario tanto el centro de Salud como en los consultorios adheridos.
En el manifiesto se han podido escuchar las siguientes palabras:
La denominada por la Consejería de Sanidad “reorganización” del servicio de salud en esta zona y en otras de la provincia de Soria, está debilitado la sanidad pública, provocando incertidumbre y desasosiego entre los usuarios. En materia sanitaria, el servicio más esencial y necesario para la ciudadanía, reorganizar no puede ser sinónimo de recortar, de dejar vacante o de recolocar quitando de un lado para poner en otro. Si no se cubre el puesto de un médico de medicina familiar y el de pediatría con nuevos profesionales que lleguen a la provincia de Soria supondrá una merma de los servicios sanitarios que se deben de prestar a los ciudadanos de esta comarca, déjense de buscar ningún tipo de eufemismos para las intenciones que están demostrando hasta el momento.
En los últimos diez días el varapalo que ha sufrido nuestra Zona Básica de Salud está resultando demoledor. Primero nos enteramos de la pérdida de un puesto de médico de familia. Esa plaza a día de hoy sigue sin estar cubierta, está vacante y su consecuencia directa es que los vecinos de Duruelo de la Sierra tan sólo tienen un médico para dar servicio a toda la población. Si solo se cuenta con un profesional, deberá realizar el doble de trabajo y atender al doble de personas diariamente con un posible colapso en la localidad durolense. Nos tememos que, esta nefasta decisión hará peligrar el débil equilibrio sanitario con el que contaba este consultorio
No era la última sorpresa que nos iba a deparar la reorganización sanitaria de la provincia de Soria. Por prensa, el día 1 de noviembre nos enteramos de la pérdida del servicio de pediatría que se prestaba dos días en esta Zona Básica de Salud. Lo más lamentable es que no es la primera vez que este servicio se ha puesto en duda, lo que nos demuestra que para la Junta de Castilla y León no es prioritario que esta comarca tenga un pediatra para atender a los niños y niñas ,ya que a la primera de cambio, cuando hay una vacante en otro lugar, la decisión es suprimirlo.
Como representantes de nuestros vecinos y vecinas no podemos tolerar esta negligencia de la Junta de Castilla y León, y que la Consejería de Sanidad no restablezca de forma inmediata a todos los profesionales sanitarios que hemos tenido hasta ahora. En estos momentos tan duros que volvemos a atravesar, en plena segunda ola de la pandemia de Covid 19, la ciudadanía no va a consentir ningún tipo de recortes, lo prioritario sería todo lo contrario, un refuerzo de la Atención Primaria, que es sin duda la puerta de entrada que todos tenemos para el acceso a los servicios sanitarios. Si durante la pandemia quedó más que demostrada la fragilidad del sistema sanitario soriano, deficitario de inversiones durante años, si la consecuencia en estos momentos son recortes, lo único que pueden esperar de nosotros es un NO rotundo. Los alcaldes, en representación de nuestros vecinos nos oponemos de forma frontal y les exigimos que cubran esas plazas inminentemente.
Lo que queremos y reclamamos es la única solución aceptable, que se cubran las plazas que han quedado vacantes y que no haya más traslados de profesionales de unas Zonas Básicas de Salud a otras hasta que no estén dotadas de sus correspondientes sustitutos.
Por último, también queremos recordar que hay personal sanitario de esta Zona Básica de Salud próximo a su jubilación y habrá que ir pensando en buscar sus posibles relevos. La situación de la plantilla sanitaria podría agravarse con esta circunstancia y por lo tanto, hay que tenerlo en previsión antes de que se produzca y se plantee una nueva merma de profesionales de la medicina en nuestra comarca.