Los muchachos de Julián Calero ya viajan rumbo a la capital gerundense tras permanecer concentrados en Zaragoza desde el partido copero ante el Real Zaragoza del pasado martes. El partido de mañana será especial, pues significará el final de la primera vuelta para ambos conjuntos y, tras el pitido final, dará comienzo a las más que merecidas vacaciones navideñas.
Sin lugar a dudas, dada la igualdad en la tabla de los dos equipos, el duelo de mañana en Montilivi se espera igualado y muy peleado, lo que ha generado que sea declarado como partido más destacado de la jornada 21. Gerundenses y burgaleses llegarán al encuentro tras completar una gran racha en los últimos cinco partidos; tres victorias, un empate y una derrota para los “Blanc-i-Vermells”, y cuatro victorias y un empate para los Blanquinegros.
El Burgos, que ha estado preparando el choque con dos sesiones de entrenamientos en la Ciudad Deportiva del Real Zaragoza, deberá tener muy en cuenta a Stuani, máximo goleador del Campeonato con doce dianas y que, a buen seguro, buscará seguir ampliando sus cifras perforando la meta burgalesa. Igualmente pendientes y seguros deberán permanecer ante Bustos y Baena, que entre ambos suman seis tantos en lo que va de liga.
Julián Calero contará con cuatro bajas seguras mañana, tres por lesión o molestias; Fran García, Saúl Berjón y Juanma, y una por sanción, la de Mumo tras ver ante el Fuenlabrada su quinta cartulina amarilla.
Por delante, noventa minutos para conseguir cerrar aún mejor una primera vuelta sensacional tras volver al fútbol profesional veinte años después.
