Todo ello con una imagen de tintes futuristas del templo gótico burgalés, que ha perdurado en el tiempo durante ocho siglos, y dándole al ciclista una imagen de poder sobrenatural como giño a la dureza que supone este deporte para los ciclistas.
En una imagen sobre fondo negro un ciclista parece sobrevolar la catedral que, en esta ocasión, ofrece una imagen lateral del templo en la que se pueden contemplar, de izquierda a derecha, las agujas, la nave central, el cimborrio y el rosetón sobre la puerta del Sarmental. Sobre ellos, en la parte alta, pequeñas pinceladas de colores que hace referencia a esa explosión de color que suponen los diferentes maillots y el colorido de la carrera a lo largo del recorrido.
En el margen derecho se detallas las fechas, recorridos, salidas y llegadas de cada una de las cinco etapas sobre las que se disputará la Vuelta a Burgos del 3 al 7 de agosto.
El cartel es obra de la diseñadora Sonia Garcia Lozano de Opciones Estudio.