El Hereda San Pablo Burgos venció al Cáceres Patrimonio de la Humanidad y enlaza su quinto triunfo consecutivo (73-63)

El Hereda San Pablo Burgos sumó la octava victoria de la temporada en el encuentro ante Cáceres Patrimonio de la Humanidad, un resultado con el que los de Paco Olmos aumentan a cinco la racha de triunfos consecutivos. Calvin Hermanson no pudo comparecer en la rotación castellana en un duelo en el que comenzaban dominando los locales, que sobrevivían a sus errores en el exterior y al dominio de rebote cacereño para mantenerse con ventaja. El cuadro burgalés superaba las aproximaciones extremeñas y terminaba sellando la victoria en casa. Los mejores fueron Marc-Eddy Norelia (19 de valoración) y Álex Barrera y Luka Rupnik (17 de valoración cada uno).

Casi tres minutos tardó en moverse el electrónico del Coliseum en un inicio de encuentro errático por parte de ambos conjuntos. Fue el Hereda San Pablo Burgos quien tomaba la delantera, gracias a las acciones de Luka Rupnik, Ale López y Obi Enechionyia (8-0). Pasado el ecuador del periodo inicial, el Cáceres Patrimonio de la Humanidad convertía su primera canasta y, tras ella, de un zarpazo, restablecía el equilibrio en el choque (8-8). Rupnik hacía jugar a los castellanos, que terminaban el periodo inaugural anotando por medio de Gonzalo Corbalán para llevarse cinco puntos de renta en la conclusión (14-9).

Querían ajustar el marcador los extremeños, que reducían la distancia a dos (18-16). Pedían tiempo muerto los locales, que se iban recuperando con el buen entendimiento entre Rupnik y Joey van Zegeren en las inmediaciones del aro (25-21). Ganaban la partida en el rebote los de Roberto Blanco, pero los castellanos aumentaban la intensidad defensiva y se procuraban opciones ofensivas que les llevaban a restablecer la máxima de ocho cuando se alcanzó el descanso (33-25).

El retorno de vestuarios mantenía por delante a los locales, que seguían desacertados en el perímetro hasta que Álex Barrera hizo efectivo el primer triple tras catorce intentos (38-31). Los visitantes se aferraban a la aportación de Dani Rodríguez ‘Pope’, Kaspars Vecvagars y de Pablo Sánchez para no desengancharse de la pelea por el partido (45-44). El dominio en su rebote ofensivo dejaba a los cacereños con opciones cuando se llegó al final del tercer periodo (51-48).

Quería poner tierra de por medio en el último cuarto el cuadro burgalés, que se hacía fuerte con los puntos de Barrera y de Marc-Eddy Norelia y elevaba a diez la distancia, lo que provocaba el tiempo muerto visitante (58-48). Se frenaba brevemente la anotación en un intercambio de faltas que terminaban con Barrera anotando un nuevo triple para salvar la distancia, que aumentaba a 12 puntos con una canasta de Van Zegeren (63-51). El tiempo muerto de Cáceres Patrimonio de la Humanidad surtía efecto (63-56), pero los castellanos cerraban ahora mejor el rebote defensivo con la gran labor de Norelia y conservaban las riendas (69-58). Las acciones finales no lograrían modificar el signo de un encuentro en el que el Hereda San Pablo Burgos acabó por sellar la victoria (73-63).

El equipo burgalés disputará su próximo partido de LEB Oro ante Zunder Palencia, el viernes 16 de diciembre, desde las 21:00 horas, en el Pabellón Municipal de Deportes de Palencia.

Ficha técnica

73 – Hereda San Pablo Burgos: Luka Rupnik (6), Ale López (9), Álex Barrera (16), Obi Enechionyia (6) y Rasid Mahalbasic (8) –cinco inicial– Marc-Eddy Norelia (11), Gonzalo Corbalán (4), Mindaugas Kacinas (-), Rodrigo San Miguel (-), Andrija Marjanovic (-), Joey van Zegeren (13), Calvin Hermanson (-).

63 – Cáceres Patrimonio de la Humanidad: Albert Lafuente (-), Pablo Sánchez (8), Kaspars Vecvagars (9), Kevin Bercy (7) y Vaidas Cepukaitis (6) –cinco inicial– Lysander Bracey (8), Willy Isiani (-), Simas Jarumbauskas (2), Julen Olaizola (2), Dani Rodríguez (18), Juan Santos (-), Carlos Toledo (3).

Cuartos: 14-9; 19-16; 18-23; 22-15.

Árbitros: Francisco José Zafra, Cristian Martín y Joan Fanés.

Incidencias: Partido correspondiente a la undécima jornada de LEB Oro disputado en el Coliseum ante 9038 espectadores.