Pablo Valcarce, un extremo izquierdo de contrastada calidad para la categoría, habitual en ella militando en equipos de Castilla y León, y que llega al Plantío después de rescindir su contrato con el Mallorca.
A sus 28 años, Valcarce suma 183 partidos en Segunda, tras encadenar siete temporadas consecutivas en ella, y ha marcado 30 goles, alcanzando cinco o más en cuatro de ellas: en dos con el Numancia y en las dos últimas con la Ponferradina, en la que gozó de protagonismo con Bolo al disputar nada menos que 71 encuentros y diez tantos en sus dos cursos en casa.
Precisamente, sobre su retorno a la Ponfe se habló en los primeros compases de un mercado en el que, tras la vuelta a Primera División del Mallorca, era sabido que no iba a seguir. El acuerdo lo alcanzó con otro equipo de la comunidad, un Burgos que, con él, comienza a reforzarse con piezas ofensivas de cara a dar un salto de calidad necesario tras el ascenso.
Valcarce es el séptimo fichaje en lo que va de mercado para el equipo de Calero, que sigue con el mismo retrato robot de los anteriores, puesto que todos ellos conocen la categoría, aunque sea, como en el caso de Riki Rodríguez, tímidamente, ya que todos han tenido cierto protagonismo en Segunda, algunos, la misma pasada campaña.