UNO DE LOS MOMENTOS MáS SIMBóLICOS VOLVIó A SER EL PASO DE LOS CORREDORES POR CALATAñAZOR
Perico inaugura el museo del ciclismo en Abejar
29 de mayo de 2016 (21:24 h.)
Poco antes de las 10.00 horas de la mañana, y pendientes del cielo, partía el pelotón de 250 corredores sobre sus bicicletas con más de 25 años tras la traca que anunciaba el inicio de la marcha. Los acompañantes, cerca de 120, les seguían durante el recorrido en un autobús, realizando paradas en los mismos puntos que los corredores y en los miradores para animar a estos ciclistas ‘vintage’.
La aventura se adentraba por pistas de tierra y asfalto para revivir el ciclismo clásico. Por ello no faltaron los maillots a equipos míticos y los complementos más pintorescos. El objetivo era transitar por pistas sin asfaltar y por caminos de tierra para revivir las competiciones de los equipos de antaño. El último tramo, de Cabrejas a Abejar y todo ello por camino de tierra, contó con el imprevisto de una fuerte lluvia por lo que el barro cobró protagonismo, haciendo este día todavía más clásico.
El recorrido de la Histórica comienza en Abejar, pasando por pueblos de gran belleza, como Muriel Viejo con su bosque de álamos, Muriel de la Fuente con la Fuentona, Abioncillo, singular por su paraje, Calatañazor pueblo de encanto medieval, Cabrejas del Pinar y como meta Abejar, la puerta de pinares.
Calatañazor era el primer punto del avituallamiento, antes de afrontar el último tramo del recorrido y el más complicado, donde hay que atravesar el, conocido entre los corredores como ‘Col du Pepinill’, una pendiente entre Muriel de la Fuente y Cabrejas del Pinar con un desnivel de hasta el 20% y en la que las fuerzas comenzaban a escasear.
Antes de llegar a la meta ubicada en Abejar, un vermut esperaba en la plaza de Cabrejas del Pinar, para afrontar los últimos kilómetros por uno de los caminos que más quebraderos de cabeza da a los ciclistas y que ha estado acompañado de un fuerte chubasco que ha obligado a los corredores a sortear baches.
Aunque finalmente la lluvia ha respetado durante la mayor parte del recorrido en una nueva jornada para revivir el ciclismo clásico y para compartir esta afición entre un grupo de amigos que año tras año repite experiencia. “Una marcha hecha con romanticismo y en un ambiente festivo” como ha señalado el propio Perico Delgado. Y es que La Histórica pretende ser una marcha entre amigos y no competitiva, evitando masificaciones para conservar su esencia, de ahí el límite de asistencia.
No ha habido ganadores ni clasificaciones, tan solo un trofeo de reconocimiento a los ex ciclistas profesionales presentes, los ‘históricos 2016’ también a los participantes más veteranos, a los más jóvenes y al club más números, Clásicos de Aranda.