Philipsen se llevó en un tenso esprint la 2ª etapa de La Vuelta a España
Entre Caleruega y Gamonal, el líder Roglic, continúa con una diferencia de 4'' sobre Aranburu , que logró restarle 2''
Segunda etapa y primera llegada al sprint, en un inicio de Vuelta especialmente generoso en cuanto a oportunidades para velocistas. Una etapa en línea que sirvió para determinar qué equipos se postulan para controlar la carrera en esta y futuras etapas al segundo.
Tuvieron que pasar 165 kilómetros de una sofocante etapa para que se supiera el desenlace de la segunda jornada de La Vuelta en la larga recta de la calle Victoria en el barrio Gamonal de la ciudad de Burgos, donde la suerte del día se decidía, tal como estaba previsto, se decidiera en un ajustado sprint. Una suerte en la que el belga Jasper Philipsen era el mejor por delante del neerlandés Fabio Jakobsen y del australiano Michael Matthews, con Alex Aranburu 6º y Jon Aberasturi 7º.
La etapa partía de la localidad de Caleruega y de inicio se formaba una fuga de tres corredores, formada por Diego Rubio (Burgos-BH), Sergio Román (Caja Rural) y Xabier Azaparren (Euskaltel-Euskadi). El pelotón fue dejando hacer a los tres corredores cabeza de carrera, les dejó que se fueran cociendo a fuego lento hasta que ellos consideraran oportuno sacarlos del fuego y dejarlos en un lado del mármol.
Conscientes de que se les tiraban encima, Diego Rubio buscó un protagonismo mayor, aunque el pelotón se les echón encima en un abrir y cerrar de ojos, cazándolos a 20 kilómetros de meta, conscientes de la disputa del sprint intermedio, que fue para Fabio Jakobsen por delante de Alex Aranburu.
A partir de este momento se tensó la carrera, con los equipos de los sprinters trabajando para llevar a sus hombres más rápidos a cabeza del pelotón. Ahí se vio a los corredores del Deceuninck, Astana, UAR, Groupama, DSM y de todo el que viera opciones de victoria. La relativa paz del pelotón se alteró por una caída a cuatro kilómetros de meta, con varios corredores del Bora implicados.
Por delante, nadie podía detener el ritmo vertiginoso de la carrera, que enfilaba la última curva a izquierdas antes de salir a la larga recta de meta. A menos de 400 metros el primero en mover ficha fue el UAE, con Trentin dejándose la piel por Molano, pero el esfuerzo de éste quedó en nada. Por su izquierda progresó como un cohete el belga Philipsen y por su derecha el neerlandés Jakobsen, siendo al final la victoria para el primero de ellos, en la que era su cuarta victoria de la temporada, que lograba su segunda victoria en la ronda española tras la del año pasado.
Por lo que respecta a los favoritos, algunos de ellos quisieron asegurarse entrar entre los más rápidos para evitar sustos y tras esta primera etapa en línea de La Vuelta el esloveno Primoz Roglic mantiene el liderato de la carrera, con cuatro segundos de margen sobre Alex Aranburu, a la espera de lo que suceda este lunes en la dura llegada en Picón Blanco, donde el protagonismo ya será para otro perfil de corredores al de hoy.