La Venta Nueva reabre el restaurante en el interior tras un servicio diario de comida para llevar
El restaurante del Hostal Venta Nueva, ubicado en el término de Calatañazor, junto a la carretera nacional 122 y el tramo de la Autovía del Duero, está viviendo el tiempo de pandemia con una continua adaptación a las circunstancias del momento, controladas por la autorizaciones oportunas y equilibradas con una continua atención y completo servicio.
La ubicación especial del establecimiento, con el paso de numerosos camiones y la cercanía a la zona donde avanzan los trabajos de la Autovía, hicieron que el restaurante consiguiera uno de los permisos especiales para poder dar el servicio en el interior del local.
Todo se reestructuró con la mejor planificación para garantizar la seguridad ante un posible riesgo de contagio del coronavirus. Mesas más separadas, servicio en bandejas que recogían los propios comensales para evitar el acercamiento entre personas, mamparas, geles, alfombra desinfectante a la entrada....,
"Vimos a camioneros emocionados por poder comer en el interior del restaurante y estar viendo la tele", comenta Pedro García, regente del establecimiento. Hasta ese momento, los transportistas estaban en una situación muy precaria tenían que comer en el camión, y hacer sus necesidades donde podían.
La disposición, con la consiguiente inversión y horas de trabajo, tuvo que ser inutilizada tras orden gubernamental. y se prohibió que la gente pudiera disfrutar del servicio de restaurante en el adaptado comedor. La alternativa era la comida para llevar, que se tenía que consumir fuera del establecimiento.
Desde el restaurante de La Venta Nueva se ha venido completando este servicio de forma personalizada, y facilitando el menú a los usuarios, sin que pudieran entrar en el comedor.
La relajación de las medidas de confinamiento para las zonas rurales, decretada por el Gobierno el viernes 22 de mayo, va a permitir que esta semana muchos transportistas, conductores en general y gente que circula por estas zonas vuelva a disfrutar del servicio de La Venta Nueva, en el interior del comedor, volviendo a emocionar por algo tan cotidiano como comer y ver la tele, algo que hasta hace poco nos parecía una rutina marcada por una necesidad.