¡En marcha!

Hace dos o tres años me creé un blog de viajes para mostrar las ciudades a las que viajaba. No es que esté viajando continuamente, ya me gustaría, pero mis vacaciones siempre las he reservado para hacer algún viajecito largo, salir del país y descubrir otros mundos.
Soy la típica que hace fotos a todo: a los monumentos, a las vistas, a las piezas de los museos, a las calles, los paisajes, la comida… No quiero olvidarme de nada. Con esta idea empecé el blog, para dar reseñas y hablar de los sitios donde he estado, poner fotos… Eso sí, nunca salgo yo, ¡porque me da mucha vergüenza! Una especie de cuaderno de viaje virtual, que cualquiera puede leer. A veces la gente deja comentarios, agradeciéndote el haber encontrado tal o cual sitio, y otras veces aportando nuevos lugares para disfrute de todos. Al final se crea una comunidad muy agradable, donde cada uno aporta lo que puede.
El caso es que en uno de estos comentarios, alguien me dijo que si no me gustaba el turismo rural, que hay muchas maravillas en nuestro país, pueblos con encanto, paisajes verdes formidables y con mucho atractivo. Y ahí fue cuando caí en que tenía muy pocos viajes a lugares pequeños. ¿Cómo podía ser eso? ¡Si a mí me encanta el arte y la historia, y la mayoría de estos pueblos están llenos de las dos cosas! Aparte de lo bien que me vendría desconectar de tanto coche, el ajetreo diario de las urbes y respirar un poco de aire puro, que ando intoxicada de ruidos, metros, oficinas, y contaminación. 
Por eso he decidido que estos pueblos serán mi próximo destino y ya estoy preparando el viaje. Además he hecho una nueva adquisición: ¡un pequeño coche descapotable! Con él no me perderé ni un detalle y la brisa al conducir  hará que sienta la sensación de libertad. 
Ya he reservado habitaciones en varias casas rurales y hoteles de distintos pueblos, y empezaré por una ruta para visitar arte románico y la naturaleza. También he echado el ojo a varios restaurantes en los que podré hacer una parada y recuperar fuerzas, degustar sus platos típicos. Quiero verlo todo, disfrutar el paisaje, la gente, la comida… ¡Qué ganas de empezar! No tengo dudas de que estas vacaciones van a ser inolvidables.