Parlamentarios del PP instan al Gobierno a desarrollar ‘Smart Villages’ para promover la economía de los pequeños pueblos
La crisis sanitaria está haciendo que se valoren las ventajas del mundo rural y toda su potencialidad cuando se alía con las nuevas tecnologías. La menor densidad de población, que en otras épocas se consideraba negativa, se ha demostrado ideal para el trabajo a distancia de nuestros días. Esta tendencia ayuda al desarrollo sostenible del entorno rural. Los pequeños pueblos, con buena conexión y trabajo en equipo, pueden llegar muy lejos. Zonas que han sufrido el abandono y la despoblación, pueden aprovechar ahora las nuevas tecnologías para dar soluciones a distancia y a precios más económicos que en grandes ciudades, ha señalado la senadora soriana María José Heredia.
La propuesta presentada por los parlamentarios populares pide que el Gobierno aporte soluciones inteligentes a los pequeños municipios, como estrategias que van desde el turismo rural hasta la agricultura ecológica o el emprendimiento, y que sean potenciadas con planes de la Unión Europea, resume el senador soriano Gerardo Martínez.
A la hora de impulsar estos ‘Smart Villages’ es necesario comprender la singularidad de cada territorio porque el concepto de lo rural no es el mismo en toda España pero, en todo caso, se debería dar respuesta a estos cuatro puntos: Detectar el modelo específico que es necesario implantar en cada lugar, basado en los recursos y oportunidades específicas de las zonas rurales; apoyar al emprendimiento, con un plan de desarrollo que permita y garantice una proyección de futuro a esa empresa, a ese autónomo, a ese emprendedor; aprobar modelos de financiación que simplifiquen y armonicen todas las fuentes de financiación, ya sea municipal, autonómica, estatal y europea, para llevar a cabo una política transversal de desarrollo territorial y, por último, el uso de las nuevas tecnologías de la información y comunicación, como herramienta imprescindible para el desarrollo de los territorios y sus habitantes.
Tomás Cabezón insiste en que "el Gobierno, en cooperación con la Unión Europea, debe trabajar en el desarrollo de Smart Villages-Territorios Inteligentes, para que las comunidades de áreas rurales puedan desarrollar soluciones que respondan a los retos en su contexto local". De esta forma, se puede llevar a cabo un desarrollo sostenible de sus territorios, así como desarrollar e implementar las estrategias de cara a mejorar sus condiciones económicas, sociales y ambientales.
Para todo ello es preciso promover la innovación y la utilización de las nuevas tecnologías digitales, por lo que solicitan "que se aborde un proyecto ambicioso de futuro y se facilite el uso de estas nuevas tecnologías como herramienta imprescindible para el desarrollo". También recomiendan que el inicio y la implementación de las estrategias de Territorios Inteligentes se pueda construir a partir de iniciativas existentes, “todo ello con el objetivo de dar respuesta a la despoblación y a la pérdida de servicios en las zonas rurales”. Como recuerda María José Heredia un primer paso sería, como ya pidieron al Gobierno, la recuperación del denominado Plan 300x100 de internet banda ancha, con velocidad de 300 Megas para el cien por cien de los municipios, dotado presupuestariamente con 525 millones de euros, de los cuales 395 corresponden a fondos FEDER.