Abatido un lobo dentro del término de Palacios de la Sierra
Los ataques de lobos han sido una amenaza durante años a la cabaña ganadera ovina, y Palacios fue uno de los pueblos más afectados por estos ataques del animal depredador.
Los cazadores han abatido estos días un ejemplar de lobo en el término de Palacios de la Sierra, cuya imagen nos muestra la fotografía, enviada por Antonio Martín. La presencia de los lobos viene suponiendo una constante amenaza a la pervivencia del ganado ovino, y se ha visto frecuentar a los animales en zonas como la de El Carrascal.
La sierra de La Demanda aglutinó en 2011 más de 200 muertes de ovejas y vacas por los lobos y en 2012 la Junta tiene constancia de 31, todos de ovejas y, al igual que otros años, la mayoría ocurridos en Palacios de la Sierra. En otra de las zonas ganaderas por excelencia de la provincia, las Merindades, también hubo disminución, pero no tan exagerada: 38 animales muertos en 2011 y 26 en 2012, de los cuales 17 fueron devorados en agosto en una misma localidad, Valle de Mena. Este último fue el percance más grave de los denunciados ante la Consejería de Medio Ambiente en todo 2012, puesto que además de las ovejas que murieron, hubo otras 12 heridas o desaparecidas, siempre según los partes de los ganaderos.
El número de lobos que los cazadores pueden abatir en la temporada 2015/2016 en Castilla y León, al norte del río Duero como establece la normativa europea para proteger a esta especie al sur, aumenta ligeramente respecto al año anterior hasta los 143 ejemplares, frente a los 140 de la pasada campaña.
Así lo fijaba la resolución dictada por la Dirección General de Medio Natural de la Junta de Castilla y León que este miércoles publica el Boletín Oficial de la Comunidad, que reparte el cupo de lobos que se pueden cazar entre 33 comarcas de seis provincias: Burgos, León, Palencia, Soria, Valladolid y Zamora.
Con los datos de años anteriores, León se mantiene como el territorio con un número más elevado de lobos que podrán ser abatidos, al repetir con los 50 ejemplares de la temporada anterior, seguida de Zamora, que aumenta hasta los 40 animales respecto a los 36 de año anterior, y de la provincia de Palencia, que también mantiene sus 31 animales del pasado año.
Con un menor número se mantienen en la cifras de la anterior campaña Burgos, con quince y la misma distribución comarcal; y Soria, con tres y en las mismas zonas, mientras que Valladolid pasa a tener un cupo de cuatro frente a los cinco de la pasada temporada.