El acceso de vehículos a la zona de la ermita del Cañón no está autorizado en esta jornada del 24 de agosto
Hoy 24 de agosto debería de ser una jornada de bullicio y fiesta en el corazón de El Cañón de Río Lobos, con la romería de San Bartolomé, incluida en los actos festivos del municipio de Ucero. Sin embargo, la pandemia de la covid-19 ya llevó hace semanas a cancelar las actividades festivas, y no autorizar la llegada de vehículos a la zona más próxima a la ermita.
De los distintos pueblos próximos a El Cañón parten todos los años distintos grupos que realizan la ruta a pie para participar a las 10 de la mañana en la misa del peregrino y es a las 12 horas del mediodía cuando tiene lugar la misa mayor y la procesión alrededor de la ermita con las imágenes de San Bartolomé y la Virgen de la Salud. Muchos de los que entran en la ermita besan cada año el manto de la Virgen de la Salud, una costumbre antigua con la que los devotos piden salud para el año próximo, tras encender la oportuna vela. La tarde dará paso a la celebración del Santo rosario a las seis y misa media hora después.
Este verano, numeroso público ha vuelto a disfrutar del interior del templo, tras las obras de adecuación y reforma acometidas `para salvar parte de su estructura, ya dañada por el paso del tiempo. La entrada se cobra a un euro, y el dinero es destinado a continuar con la intervención en el edificio.
A esta ermita, que formó parte de lo que en su día fue el Monasterio Templario de San Juan de Otero, la envuelven con mimo los farallones y una gran cueva que en la noche de San Juan acoge a quienes se nutren de la energía de este enclave desde donde se sienten las propiedades telúricas que envuelven a este conjunto.
De estilo románico o protogótico su construcción data del siglo XII. La leyenda cuenta que el Apóstol Santiago, montado a caballo, saltó desde lo alto de uno de los farallones que rodean la ermita. Los cascos dejaron sus huellas sobre la piedra y la espada cayó al suelo quedando clavada en el lugar exacto donde se encuentra construida la actual ermita de San Bartolomé. Sin duda, un lugar lleno de secretos y misterio.