La Aemet prevé una primavera más cálida de lo habitual tras un invierno con las temperaturas más altas
La primavera, que comienza el viernes 21, será probablemente más cálida de lo habitual en España, y más seca de lo normal en el tercio norte, lo que afecta a la comarca de Pinares de Burgos y Soria. Durante la estación que vamos a estrenar, lo más probable, según la Aemet, es que llueva menos de lo habitual en esa época del año en el tercio norte, principalmente en Galicia y Asturias. En el resto de España la probabilidad de los terciles, en relación a la precipitación, es la climatológica, lo que significa que no no existe una tendencia clara. Además, se apunta a una mayor probabilidad de que la temperatura alcance valores superiores a los normales en España considerando el periodo de referencia 1981-2010.
Con esta nueva estación se despedirá un invierno que ha sido más caluroso de lo habitual en términos generales, y que en el caso de Castilla y León ha sido húmedo e incluso muy húmedo en algunas zonas.
Según el análisis de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), este invierno ha sido el más cálido en España en el siglo XXI con una temperatura media de 9,7 grados centígrados, es decir, 1,8 grados centígrados por encima de la media. Ha sido el segundo invierno más cálido desde 1965, año de comienzo de la serie, por detrás del invierno 1989-90.
El invierno resultó muy cálido o extremadamente cálido en la mayor parte de la España peninsular, mientras que fue muy cálido en Baleares y entre cálido y muy cálido en Canarias. Las anomalías térmicas fueron en general mayores en regiones montañosas y zonas elevadas de las mesetas.
El invierno comenzó con un mes de diciembre muy cálido, con una temperatura media que se situó 1,9 grados centígrados por encima de la normal del mes. Enero resultó cálido, con una temperatura media 0,5 grados centígrados superior a la normal. El mes de febrero tuvo un carácter extremadamente cálido, quedando tres grados por encima de la media de este mes, resultando el febrero más cálido desde el comienzo de la serie en 1965, en los mismos niveles que el de 1990.
Los valores más bajos del trimestre se registraron en los dos episodios fríos de enero, destacando entre estaciones principales el Puerto de Navacerrada, con menos 10,8 grados medidos el 20 de enero; Molina de Aragón, con 10,3 grados bajo cero el 12 de enero; Teruel, con 8,6 grados bajo cero el 13 de enero; y Salamanca/aeropuerto, donde se observaron 6,7 grados bajo cero el 12 de enero.
En lo referente a las precipitaciones, la cantidad acumulada este pasado invierno en España se ha aproximado al valor normal de la estación: los 192 litros por metro cuadrado recogidos en promedio en el conjunto de España han quedado un cuatro por ciento por debajo del valor medio del trimestre según el periodo de referencia 1981-2010. Estas precipitaciones tuvieron una gran variabilidad espacial y temporal, siendo húmedo o muy húmedo en un área que abarca desde Aragón y Cataluña hasta Murcia, en zonas al oeste de Castilla y León y en Baleares, aunque en otras zonas de la Comunidad las lluvias no alcanzaron el 75 por ciento de su valor normal.