La Cámara de Comercio realiza gestiones para lograr una Marca de Garantía para el Chorizo de Soria
El objetivo es que el sello pudiera estar listo en el marco de dos años. La nueva catalogación podria suponer un revulsivo para empresas que operan en la comarca pinariega, donde el chorizo es uno de los productos con mayor prestigio por su especial elaboración, curación y calidad.
La Cámara de Comercio y de Industria de Soria ha comenzado a dar los primeros pasos administrativos para que, en un plazo aproximado de dos años, el chorizo elaborado en Soria pueda conseguir la Marca de Calidad, según ha destacado el presidente de la entidad, Alberto Santamaría, quien detalló que de las 42 empresas cárnicas que elaboran este embutido de forma tradicional en la provincia ya hay 15 interesadas.
Los productores cárnicos que se dedican a fabricar chorizo de forma artesanal pretenden reeditar la misma fórmula de “éxito” que con el torrezno, es decir, “comercializar este producto con la misma garantía, con un formato que de visibilidad al producto y un sello que garantice su trazabilidad”.
La Cámara de Comercio, que de conseguir el sello será la titular de la figura de calidad, al igual que lo es con la Marca de Garantía Torrezno de Soria, ha contratado los servicios de una consultoría externa que elaborará el proyecto que debe presentarse a la Junta de Castilla y León. Además, los técnicos del órgano cameral se reunieron, la pasada semana, con los directores y responsables del ITACyL en Valladolid para dar a conocer su intención y plantear el proyecto.
Alberto Santamaría señaló que la Cámara es “conocedora” de los pasos que se deben dar para conseguir este objetivo, pero, a su vez, señaló que es “consciente” de que es más difícil comercializar el chorizo, debido a la competencia nacional. A pesar de ello, se mostró “optimista”, ya que el torrezno con Marca Soria ha abierto el camino a los productores del sector en la provincia.
A este respecto, apuntó a que en Soria el torrezno era, antes de conseguir el sello, un producto más secundario comercialmente, ya que lo que verdaderamente tenía fama era el chorizo, y actualmente se conoce “mucho más” tras conseguir el distintivo. No en vano, el torrezno de Soria, agregó, “se comercializa en media España y ya empieza a internacionalizarse”.
En este aspecto, detalló que el proyecto recogerá cómo en todas las casas del medio rural hay al menos una máquina de hacer chorizos, es decir, demostrará que existe una tradición, que ha convertido a este embutido en “una cuestión cultural e histórica”, y agregó que ese “saber hacer del chorizo casero tradicional se ha sabido trasladar a las empresas cárnicas”. El proyecto ha despertado “gran interés” entre los productores, ya que solo se ha producido un primer contacto con ellos y son 15 los que se han sumado a la estrategia.
“ Son los empresarios los que nos empujan y nuestro papel como Cámara es hacerlo bien y darles cobertura. Creemos que la marca chorizo de Soria tiene esa connotación de calidad y tenemos que estar en el mercado con todo aquello que nos de posibilidades de crear empleo en el medio rural, ya que este sí que es un producto muy ligado a la provincia, debido a que las fábricas cárnicas se ubican en él”, argumentó.
Asimismo, avanzó que la intención de la Cámara y de los productores no es competir internamente con otras provincias de Castilla y León, que también son famosas por elaborar los mejores embutidos de España, ya que el mercado es “global”, y el sello se conseguirá en función de criterios técnicos y objetivos, “que no políticos”.
“ La Junta de Castilla y León nos exige demostrar qué tiene el chorizo de Soria para diferenciarlo de otros que no tienen marca de garantía y en esto estamos trabajando. El chorizo de Soria tiene un sabor especial gracias a la altitud de la provincia, a la utilización de las mejores carnes y la escasez de grasa que utilizan para elaborarlo ”, justificó.
Asimismo, matizó que el éxito de las ventas del Torrezno de Soria se basa en “la calidad del producto, el buen hacer y también en la buena sintonía entre los productores que conforman la Asociación de Fabricantes de Torrezno de Soria”. En este aspecto, reseñó que la Cámara y los propios productores han sabido cooperar y no verse como competidores, ya que fueron conscientes de que el crecimiento económico, gracias a la obtención del sello, era “vertical” para todos.
“En Soria es muy difícil llevarte bien con tu competidor. Pero cuando han visto que el producto va más allá y que no es necesario darse con el codo porque no solo se vende en Soria, se han unido y han crecido todos”, concluyó.