El rebozuelo, la seta con la que arranca el verano
Las elevadas temperaturas han mermado la proliferación del cantharellus cibarius entre la masa forestal. De olor intenso, y color amarillo, esta variedad micológica ha tenido mayor presencia en las dos últimas semanas.
Los rebozuelos se han hecho presentes durante estos días en diferentes montes de la comarca pinariega. Proliferan en las zonas frescas, junto a trampales y meandros de los ríos. Tienen en común su intenso color amarillo. Conocido en distintos lugares como chantarella su nombre científico es Cantharellus cibarius.
Menos introducido en la cocina que otras especies micológicas, el rebozuelo tiene un ciclo bastante largo y requiere de lluvias más o menos constantes en un periodo de 30-40 días ya que su crecimiento es muy lento. Sin embargo, las previsiones de precipitaciones no parecen llegar por lo que se reducirá de forma clara el periodo de su proliferación.
La Amanita Cesárea, el Boletus aereus, el estivalis y algún que otro níscalo ya entrados en el mes de agosto son las setas que más suelen proliferar durante el mes de agosto, aunque el ciclo se ha visto alterado pòr cambios significativos en temperaturas y precipitaciones.