Buen ambiente, sol e intensa colaboración en la pingada del Mayo en Navaleno
Los jóvenes entregan una placa a Jesús Orte Garicoechea por su colaboración e impulso de la fiesta durante años en la localidad. Una comida termina con los actos de estos días.
Tras la elaboración de las tijeras de madera, la preparación de las sogas y esttacas, ya cerca de la una del mediodía, dio inicio el rito de la pingada ante la atenta mirada de la gente que se había congregado, en la zona de La Subida al Raso,junto al Consultorio.
En hora y media el pino de 23 metros de altura ya estaba levantado, contando con las dificultades propias de un terreno en el que el orificio no es de cemento, o permanece todo el año, como en otros pueblos, y al ser tierra precisa de más estacas.
Este año, el grupo organzador ha querido agradecer la labor de Jesús Orte Garioechea, con la entrega de una placa, que se realizó en la Plaza de Los Quintos en la noche del día 30 al entrar el pino en el pueblo.
La música de los gaiteros ha estado presente en la traída del pino y la pingada durante estos dos días, y todos han disfrutado de estas dos jornadas tan entrañables.