Vuelve la Semana Santa en Lerma con la Pasión Viviente como referente el Jueves Santo
La localidad de Lerma, retoma la actividad de la Semana Santa como el resto de muchos pueblos. El municipio, ubicado en la comarca del Arlanza, se caracteriza por contar a lo largo del año con numerosos y multitudinarios eventos, y, uno de ellos, es la tradicional Semana Santa. Sin duda, mencionar la Semana Santa de Lerma, es destacar la tradicional puesta en escena de la Pasión Viviente.
Este evento se desarrollará a partir de las 21.00 del 14 abril, Jueves Santo, por las calles y rincones del pueblo. Al anochecer, da comienzo una excelente Representación de la «Pasión Viviente de Cristo», en la que actúan más de doscientas personas y cuyas es-cenas van sucediéndose a lo largo del conjunto urbano, hasta finalizar con la crucifixión. Tanto desde el Ayuntamiento como desde el CIT de Lerma recomiendan a todos a que se acerquen en esta fecha ala localidad para disfrutar de una Pasión Viviente que destaca por su realismo y por su espectacularidad. Para llevarla a cabo, son los propios vecinos los que recrean las escenas de la Pasión de Cristo, empezando por la Última Cena y continuando con la Crucifixión y Muerte.
Al finalizar las personas suelen disfrutar con la gastronomía lermeña que ofrece deliciosos caldos pinchos y otros platos. El evento, se extiende durante aproximadamente dos horas. Para el 15 de abril, Viernes Santo, se celebra la tradicional del Santo Entierro. Aquí, la diferentes Cofradías lermeñas recorren las calles de la Villa. Destaca la Cofradía de la “Vera Cruz”, que data del siglo XVI, y es conocida como “de la capa” porque sus miembros van ataviados con la típica negra capa castellana.
En el transcurso de esta marcha, a son de las notas interpretadas por la «Asoc. Unión Musical de Lerma» se realizan breves paradas para escuchar coplas que los vecinos cantan a las diferentes imágenes religiosas, algunas del siglo XVII, de la escuela castellana de Valladolid. Entre el resto de actividades que se organizan destacan el Domingo de Ramos, con la bendición de las palmera en la Plaza de San Pedro y la posterior procesión. Por último, el Domingo de Resurrección, en la plaza de Nuestra Señora de La Piedad. Las «Mozas de la Virgen», llevan en andas a la “Dolorosa” enlutada; mientras los «Mozos del Cristo», portan en andas al “Cristo Resucitado