Portátil cargado y preparado. USB listo. Cámara en su estuche. Baterías preparadas. Chequeo el móvil. Quedan dos horas. Las muestras de nuestra morcilla de arroz están preparadas. Enciendo el motor. Comienza el viaje. Todo sucedió el pasado martes 27 de septiembre. Neila, maravillosa e histórica villa burgalesa, acogía un interesante encuentro de empresarios. Lo organizaba SODEBUR (la sociedad para el desarrollo de la provincia de Burgos). Y lo coordinaba Esther Delgado Fuente, la responsable de la Oficina que ReinventaPinares tiene ubicada en Salas de los Infantes. Todo estaba perfectamente organizado. El lugar, como no podía ser de otra manera, fue el fantástico Hotel Villa de Neila. Existía expectación, esa es la verdad y el encuentro no defraudó en absoluto. Se dieron cita empresarios de Burgos, Salas, Palacios, Quintanar o Neila, pero también hubo emprendedores sorianos, de Aragón y del País Vasco. Nada más entrar, una mesa. Sobre ella las tarjetas de visita de todos los asistentes. Sobre la barra, las primeras bebidas y aperitivos. El ambiente era cálido, cercano, amable y muy agradable. Surgieron los primeros contactos, apretones de mano y conversaciones distendidas y amables. Después, todos y cada uno de los asistentes pudimos presentar de manera breve nuestras empresas, lo que nos diferenciaba y también lo que realmente necesitábamos. Winston Churchill, el gran estratega británico, dijo una vez que si estás pasando por un mal momento lo lógico es seguir adelante. El optimismo es al empresario lo que las lentes a alguien que no ve bien. La actitud positiva es esencial. Es algo innato en aquellos gestores exitosos. Es como un buen paraguas ante una tormenta. Algo primordial. Y ese encuentro fue importante. Compartimos ilusiones, proyectos, ideas, caminos y sueños. Demostró, que a pesar de las dificultades, nuestra zona quiere vivir y luchar construyendo nuevas empresas que asienten y den calidad de vida a nuestros pueblos. Por eso, como dijo Picasso, la inspiración existe, pero debe encontrarte trabajando. Así que, ahora sí, todos a trabajar.