Uno que ha estudiado, por Juan Largo Lagunas

Juan Largo
-Pido otra cerveza, Maripi, ¿o qué? ¿Te entra otra galimba?

-Puedes pedir otra al camarero, sí, ya sabes que una aguanta de todo, mira, por ejemplo ese sujeto de ahí enfrente… Pues resulta que estaba yo en la terraza esperándote y ha venido él y se ha sentado al lado de mi mesa y no ha dicho ni buenos días ni nada… Un maleducado… Debe ser de este pueblo…. Ay, Lolita, yo vengo a este pueblo por lo de la Fiesta,  que me encanta, eso de las mujeres con los ramos, todo debe ser un rito sexo-antropológico, que aquí quisiera yo ver a Julio Caro Baroja para que nos lo explicara…

-Pero, dime, dime, Maripi, parece que no paras de hablar, llevas rajando ya hace un rato…

-No es por nada, debe ser que ya llevo cinco galimbas, ¡cuánto me gustan las galimbas, Lolita!..., ¡no lo sabes tú bien! En la capital salgo a eso de la hora de salir, las dos de la tarde y nos reunimos toda una peña de nosotras, las mujeres, para tomar galimbas… Bueno, no se nos pasa nada de la capital, nos contamos todo, somos mejores periodistas que los periodistas… Fíjate que el otro día estábamos la Pepita y la Plomos y la Josefina tomando unas cañitas y nos viene un camarero que nos molaba cantidad… ¡Había que ver qué tronco!... “¡Si lo cogiera una donde lo tiene que coger!”, dijo la Josefina… “Eso –dijo la Plomos, que su marido es electricista-, si una lo cogiera por donde lo tiene que coger, no os dejaba nada, chicas…” A lo que saltó la Pepita que ella tenía más clímax ahora que cualquier jovencita… “Para comérselo…”, dijo la Pepita… No como el chico este, Lolita, bueno, “chico o chica”, no sabe una ya diferenciar, en nuestros tiempos pasan cosas muy confusas, o sea, no sabes dónde está la verdad… Es un tío, tenlo en cuenta, Lolita, se le nota el paquete y todo lo demás, lo curioso es que lleva un libro en la mano que parece que es de filosofía, por lo que parece, parece que pone de autor el de Rafael Sánchez Ferlosio, el del “Jarama”, ya sabes, Lolita… O sea, ¿qué le puede importar a un mariposo de aquí el libro de Sánchez Ferlosio?... No, si una va a salir loca en estos tiempos que permiten a los invertidos, y lo que hay que hacer es mirarles bien a los ojos y ver si te sostienen la mirada, porque si no te la sostienen, es que son sospechosos, ese es el mejor examen… ¡No me extrañaría nada que ese tipo fuera un moderno de esos que se creen que con un libro bajo el brazo ya son alguien y luego solo quieren llamar la atención para ligar!...

-Pero, dime, Maripi, ¿es tío o es tía?.., Porque parece del otro bando…

-¡Ajá!... –dijo Maripi- ¡No te equivoques, puede ser un tío y además un poco pretencioso!... Mira, nos ha oído que estábamos hablando de él… Se ha levantado y viene hasta aquí… ¿Qué viene diciendo, Lolita? ¿Lo oyes?..

-¡Eso!... ¿Qué nos viene diciendo el muy cretino?... ¡A qué llamo a nuestros maridos!...

-Sí, señoras, yo soy… ¡Uno que ha estudiado! ¡Para que se enteren!...

-Ah..oh… ¡qué horror, Maripi!            

 

  Juan Largo Lagunas