La Coordinadora Montes Vecinales es para sus socios lugar de encuentro y ocasión de compartir sus inquietudes. Algunas
personas asociadas en la CMV leemos con atención e interés pinaresnoticias.com del invierno 2012-2013 que se
distribuyó gratuitamente en distintos lugares de la comarca. A la excelente calidad de papel y trabajo de imprenta añade la
orientación de los temas que trata. Observando el contenido (biomasa-Norma-Unopan-bosques modelo- Cesefor) nos surgen
alegrías, dudas y reflexiones que compartimos a continuación.
Juan José Lucas, siendo presidente de la Junta presenta el libro “Modelos de gestión de sistemas de recursos comunales en Castilla y León” con estas palabras: “Las tierras comunales constituyen en Castilla y León no sólo un importantísimo patrimonio de los Entes Locales sino también un autentico legado histórico y cultural por las diversas formulas de explotación y redistribución surgidas por necesidades de las economías locales y por los derechos consuetudinarios de los vecinos..(......)..resaltar la contribución de los bienes comunales a la conservación de grandes masas arboladas en algunos de los más ricos territorios de la orla montañesa de Castilla y León., en los que merced a una gestión altamente respetuosa de los bosques se ha conseguido preservar para las actuales y futuras generaciones una riqueza inestimable”.
En la revista un responsable del CESEFOR se refiere a un PLAN DE NEGOCIO que afecta “a una zona muy amplia que
engloba a parte de la sierra de la Demanda burgalesa desde Salas al Valle de Valdelaguna y los pinares de Soria y Burgos”. También se cuenta de la elaboración de estudios y planes (del potencial de biomasa, de detección de oportunidades, de viabilidad, etc.) y nuestros ediles dicen estar expectantes, satisfechos y cautos.
Se anuncia para “el inicio de 2013 una ronda de reuniones para difundir la iniciativa e ir buscando el consenso para su ubicación en la zona”. Nos alegra la celebración de esa ronda de reuniones donde deseamos se aporte con claridad y transparencia el resultado de los diferentes estudios, se informe en los pueblos y podamos hacer un riguroso y público análisis de los datos. Si así no fuera, a los legítimos propietarios de los aprovechamientos de los lugares donde se quiere hacer negocio se nos impediría cumplir responsablemente con la obligación de velar por nuestra propiedad.
Nos parece también adecuado y necesario, pues ganaríamos tiempo en lograr el consenso, que mientras finalizan proyectos y estudios se distribuyera entre los vecinos (no importa que el papel sea de menor calidad que el de la revista y sirve en blanco y negro) información ya disponible, resultado de los distintos trabajos que con dinero público administraciones/entidades vienen haciendo en los últimos años sobre los recursos-bienes de la zona. Así se ayudaría mucho a la participación local, para nosotros muy importante, como también dicen lo es en el “ideario de los bosques modelo”.
Nos surgen dudas ante el significado de estas palabras que se reflejan en la revista:”Los promotores –grupo inversor de capital árabe- exigen un compromiso de los pueblos en el abastecimiento de la madera” y un responsable del CESEFOR señala que “echamos en falta en la cadena un suministro estable tanto en precio como en cantidad”.
¿Cómo puede asegurarse el suministro sin saber la capacidad de producción que se pretende?. Existe BURPELLET en Doña Santos, AMATEX en Cabrejas, RIBPELLET en Huerta, UNOPAN en Salas (quién según noticias de la revista le interesa fabricar lo máximo posible con madera procedente de limpias y clareos), proyectos de cogeneración en Quintanar y parece que también la central de Garray para la futurible Ciudad del Medio Ambiente se abastecería de pinares......y mientras Neila, parque natural, Urbión también, Río Lobos, la Fuentona, Sabinares del Arlanza son también espacios protegidos.....¿DE DÓNDE Y CÓMO ESE ABASTECIMIENTO ESTABLE EN PRECIO Y CANTIDAD?.
La capacidad de carga de los bosques de un territorio es la cantidad de biomasa que produce dicho bosque en un periodo de tiempo. Si se supera esta capacidad de carga con actividades extractivas, entonces nos incluiríamos en el modelo de” vivir por encima de nuestras posibilidades”, o sea a crédito del futuro de nuestros montes y de nuestros hijos.
¿Se ha calculado correctamente la capacidad de carga de nuestros montes para no superarla por mucha necesidad de abastecimiento que tengan estos negocios privados?,¿Se considera la influencia negativa del cambio climático en la
evolución de nuestra cubierta vegetal? , ¿Han evaluado la enorme pérdida de calidad de los –ya de por sí pobres- suelos forestales, en el caso de excederse en la extracción de biomasa? ¿Se pretende transformar lo que de bosque nos queda en una plantación de árboles?.
Si así fuera habría que olvidarse de la multifuncionalidad que en nuestra gestión tradicional ha existido (pasto, caza, ganado, setas, frutos, uso social y educativo, servicios ecosistémicos....) y que la nueva ciencia forestal, la que no se ha sometido al mercado, difunde en sus investigaciones. Un monte aviverado servirá para cortar y quemar, para industrias extractivas quizás pero no permitiría ganadería extensiva, ni caza, ni recursos micológicos, ni turismo, ya no podríamos ser un modelo de bosque.
Albert Einsteín dijo que “no podemos resolver problemas usando el mismo tipo de pensamiento que usamos cuando los creamos”. Tenemos serios problemas de despoblación, nos quitan servicios que ya eran insuficientes, la crisis económica y la falta de ocupaciones productivas ahoga el futuro de las gentes en nuestra tierra. Coincidimos en la necesidad de poner en valor lo que somos y tenemos, agradecemos ayuda y colaboración de administraciones, técnicos e instituciones pero si miramos al bosque vemos algo más que euros y la frase “hay que sacar el máximo valor al monte” nos parece que necesita complementos, “de forma sostenible” y “con equidad social” cuando menos.
Sabemos que los negocios bien diseñados y pensados, con trabajo y esfuerzo generan riqueza y ocupaciones. Sabemos también que a veces, los sobredimensionados y burbujeantes arruinan y desesperan a personas y comarcas. Queremos hacer lo posible para que los negocios a desarrollar en esta tierra no sean estos últimos. Si por tener frío y falta de leña se quema la casa habremos descapitalizado nuestro lugar y nuestra forma de vida, nuestra cultura. Se dice que las crisis son también oportunidades, pues no sigamos pensando y actuando como últimamente se viene haciendo y busquemos consensuadamente un camino que nos permita sobrevivir con dignidad y de forma saludable en nuestra tierra.
Valoramos el saber hacer de nuestras gentes en el territorio. La experiencia vivida en los pueblos nos indica que en tiempos no tan lejanos, cuando escaseaba más que hoy el dinero, la vida en la sierra de pinares tenía fuerza, era dura y sacrificada pero también rebosante y provechosa. No se trata de volver al pasado pero si de no olvidarlo, de aprender de él y desde la realidad en la que estamos trabajar por un futuro donde nuestros bienes comunales, sus aprovechamientos y la población sigamos existiendo. Hacemos nuestra la frase del músico Gustav Mahler: “La tradición consiste en transmitir vivo el fuego, no en adorar las cenizas”.
Coordinadora Montes Vecinales.