En el Boletín de Castilla-León del 26 -12-2008 se declara “Parque Natural” al espacio denominado “Lagunas Glaciares de Neila” que coincide en sus términos con los límites del municipio. Era una declaración de amor a esta tierra por la que nos sentimos halagados. Fuimos testigos de la remodelación de la Iglesia de San Miguel como “Casa del Parque” con los mejores medios de exposición, tanto informáticos como en paneles, respetando el arte románico del ábside, la torre del campanario, la pila bautismal, la amplia nave central y coro.
Creímos que nacía un desarrollo rural sostenible para el pueblo y nos congratulamos por ello. Comprobamos que El Refugio cambió de ubicación hasta un recóndito lugar –demasiado recóndito- y que para acceder a la Laguna Negra hacía falta media hora de paseo por entre unas falsas morrenas que impiden el acceso de cualquier tipo de ruedas ni siquiera para un rescate de viandantes aquejados por algún accidente aunque sea leve. Creímos que la carretera iba a ser de posible acceso en invierno y que, a lo mejor, la declaración de “Parque Natural “iba a crear puestos de trabajo.
Hasta aquí pura utopía. A lo mejor el objetivo de los Parques es la despoblación de los municipios para conservar y gestionar desde fuera sólo el entorno natural para disfrute de aquellos ecologistas “talibanes” a los que les molesta hasta el aliento humano. Pues ya vamos por medio camino. Será la crisis. Antes, los vecinos llevaban a cabo las mejoras y limpieza del monte y… bueno, era los pinos una ampliación del hogar. ¡Ah! Y ha desaparecido del collado de Quintanar-Neila el cartel que anunciaba “Parque Natural de las Lagunas Glaciares de Neila” ¿Es que nos han borrado del mapa?
Existe otro objetivo más efectivo: promover un desarrollo rural sostenible en torno al mantenimiento del monte, el turismo, la ganadería…como un paliativo a la crisis económica. Sólo hace falta voluntad política.