¿Y después de Castrovido, qué?
Recuerdo con especial nitidez el anuncio de la construcción del AVE de Madrid a Barcelona, y el regocijo con el que se vivió en la ciudad de Soria y su entorno.
Ya estaba la salvación. El tren de alta velocidad iba a sacar a Soria de su aislamiento. Ponerse se puso en funcionamiento, y sigue; pero por Soria no paró, ni para, ni parará. Nos quedamos como los simpáticos habitantes de Villar del Río en ‘Bienvenido Mr. Marshall’.
La presa de Castrovido es la inversión más cuantiosa de las que podemos tener en un radio de 80 kilómetros a la redonda en años y años. Nunca en la historia se había realizado un desembolso económico tan grande en materia de infraestructuras en la comarca. 220 millones de euros es una cifra considerable.
La abultada inversión y el hecho de ver la obra ya muy avanzada nos hace pensar que tras su puesta en marcha, algo beneficiará a la zona. Somos conscientes de que los grandes beneficiados serán los pueblos que están aguas debajo de esta presa, desde Salas al campo regado por las aguas del Arlanza. El cauce se va a estabilizar, y se evitarán inundaciones; el agua embalsada servirá también para completar el cauce en épocas de sequía. En definitiva, normalizar, que también toca.
Tras la petición de una boca de agua, para suministro de líquido potable, que promueve Castrillo, como compensación por los terrenos expropiados, queda el uso turístico que se pueda impulsar con la presa-pantano. Visto el precedente del embalse de La Cuerda del Pozo, el tema, cuando menos, nos parece harto difícil. Tras la ‘inundación’ de La Muedra a inicios de los años 40 del pasado siglo hasta que comenzaron a realizarse las primeras infraestructuras ‘serias’ para el turismo pasaron décadas.
La Cuerda del Pozo todavía no tiene aprobado un plan de usos, y siguen conviviendo las motoras con los bañistas como Dios nos dio a entender. Queda pendiente una regulación adecuada que, a estas alturas, todavía no está en la parrilla de salida.
Lo importante ahora es la presa de Castrovido funcione. Lo importante después será que nosotros funcionemos con la presa. ¿Alguién da más?.