En Navaleno, la pingada del Pino Mayo ha ido ganando en participación, expectación y actividad durante los últimos años, hasta el punto de convertirse en una fiesta ineludible para la práctica totalidad de los jóvenes y buena parte de los habitantes de la población.
En la edición de este año, a la traída desde el monte se sumaba también, en la noche anterior, la discomóvil en el polideportivo, y el buen ambiente de todo un fin de semana con mucha gente en el municipio pinariego.
- Sólo hubo que lamentar el accidente de una persona a la que una de las ruedas le pilló el brazo, con una rotura como consecuencia, de la que se está recuperando.