Dispuestas a decidir el signo de la fortuna en el fugaz instante en el que son lanzadas al aire, dos monedas de cobre de diez céntimos con la efigie de Alfonso XIII en su anverso han hecho que Aldea del Pinar, un pueblo que en invierno es habitado por una decena de vecinos y que en fiestas llega al centenar, sea conocida popularmente en estos días de invierno por contar entre sus actos de las fiestas del Jesús con una de las más peculiares tradiciones de la comarca de Pinares: el juego de las chapas.
Solo durante la noche de este sábado 14 podrá escucharse el sonido de las monedas al caer contra el suelo ya que únicamente es en estas fiestas cuando se revive esta tradición con años de historia que se perdió hace décadas y que fue recuperada en 2005 gracias al empeño de la Asociación Cultural ‘La Veceda’ formada por descendientes que no faltan a las citas importantes con el pueblo.
El programa de festejos arranca con el voleo de campanas a las 17 horas. A partir de las 19 horas juegos populares, y el juego del chapeo se inicia a las 23 horas. El domingo, a las 12,30, misa y procesión amenizada por los gaiteros, y posteriormente degustación de la 'Torta de Jesús' con moscatel.