El homenaje al cerdo, a los trabajos para su aprovechamiento y gastronomía se reviven en la plaza de San Leonardo el domingo 18 de febrero. El rito cumple su vigésimoprimera edición, y se inicia tras la ceremonia eucarística en la iglesia, antes de la hora de comer. Desde el templo parroquial llegan los grupos de baile, y ya en la plaza interpretan algunas de las piezas más tradicionales, tanto de mayores como infantiles.
El gorrino se sorteará en esa jornada entre quienes compren el boleto que la Asociación la Caldereta ha vendido estas semanas de atrás en la población. El programa combina los trabajos para adecuar el cerdo con la degustación de las viandas en la plaza principal de San Leonardo.
Los miembros de la Asociación La Caldereta se hacen cargo, un año más, de la organización, y Andrés Marcos relata cada uno de los pasos en el desarrollo de la jornada. Ellas, ataviadas para la ocasión, preparan los primeros embutidos del animal sacrificado. Hay reparto de viandas para todos los presentes. Al final, entre los miembros de la agrupación, se degusta la comida en medio de la plaza.
La de San Leonardo,y si el tiempo lo permite, es, junto con la de Salas de los Infantes, una de las matanzas del cerdo de la comarca que más gente congrega, algo que se nota en las filas de público que esperan el reparto de las viandas.
