Así que pasen cuatro años. La Junta de Castilla y León ha vuelto a poner de manifiesto su ineficacia a la hora de apostar por el mundo rural. El Ayuntamiento de Navaleno ha recibido, casi un lustro después de su solicitud, la autorización para la segregación de una parcela del monte público junto al polígono industrial de El Arrén.
La petición estuvo motivada, en su momento, por la petición de suelo industrial por parte de una empresa para ejecutar unas instalaciones orientadas a la producción de biomasa. Tras este tiempo, la duda se cierne sobre si las intenciones de la firma promotora seguirán siendo las mismas.
El beneplácito de la Junta no responde a la petición formulada en su día por la institución local, ya que desde Navaleno se solicitó la segregación de 40.000 metros cuadrados y desde Valladolid sólo han autorizado 28.000, argumentando el paso de la Cañada Real y la necesidad de protección de parte de la fauna. "Está demostrado que por ahí no pasa la Cañada", explicaba el alcalde, Paulino Herrero, en el pleno desarrollado por la corporación el jueves 30 de enero.
La intención del Consistorio pinariego es acometer las obras de urbanización de la parcela, sita junto a la zona industrial en la subida al Puerto de Mojón Pardo. Para la financiación de, coste de las intervenciones, desde el Ayuntamiento se solicita a la Diputación Provincial la subvención económica correspondiente en base a la convocatoria abierta por la institución en materia de polígonos y actuaciones industriales.
El objetivo es la urbanización de la parcela, dotación de suelo municipal y aparcamiento con vistas a la ampliación de un polígono con varias naves construidas desde anteriores décadas.