La formación de Brigadas contra Incendio de la Diputación de Soria es una necesidad, y por ello, su adecuada integración, equipamiento o entrenamiento influirá en la seguridad de los ciudadanos ante posibles incendios en el interfaz urbano-forestal o en zonas con afluencia de gente donde se puedan ocasionar incendios.
Para la ejecución de estas tareas, el pasado mes de junio, la institución provincial puso en marcha el servicio de Brigadas Forestales compuesto por 34 profesionales que terminarán las labores de limpieza el próximo mes de enero. De ellos, 27 son peones, cinco capataces y dos técnicos, además de operarios del Departamento de Vías y Obras que refuerzan las labores de limpieza de las brigadas.
En concreto, desde el pasado mes de junio hasta el 4 de diciembre las brigadas forestales han realizado tareas en 330 localidades repartidas en cinco zonas de la provincia. En total las brigadas tienen que acometer tareas de desbroce, corta y poda en 335 puntos de la provincia de Soria.
Para el desarrollo de los trabajos, se han conformado cinco brigadas forestales que se distribuyen en las cinco demarcaciones planificadas en el proyecto.
Por zonas, en Tierras Altas se han acometido trabajos de limpieza de vegetación en 76 pueblos.
En la zona de el Burgo de Osma han trabajado en un total de 57 pueblos.
En la zona de Almazán-Medinaceli se ha actuado en 55 pueblos.
En la comarca de Pinares las actuaciones han llegado a 66 pueblos de la provincia.
En la zona de Almenar se ha atendido a 76 municipios.
Se trata de un servicio cada vez más demandado.
“Este año se ha incrementado en un 5% el número de ayuntamientos que solicitan el servicio, quienes además agradecen el trabajo que se realiza desde la Diputación provincial”, ha destacado el diputado de personal, Javier Navarro.
En 2019, las brigadas forestales realizaron labores de limpieza y adecuación de las zonas periurbanas de 287 Localidades, llegando a un total de 378,39 hectáreas.
Las tareas son las mismas en todas las zonas, destacando la prevención de incendios en el interfaz urbano-forestal, la apertura de fajas auxiliares contra incendios, adecuación de áreas recreativas, adecuación de riberas, adecuación y mantenimiento de sendas y limpieza de cunetas en carreteras de la provincia.
Por su parte, la técnico forestal es la encargada de la coordinación y organización. “Coordina las cuadrillas, determina los trabajos necesarios a acometer en cada municipio y se encarga de redactar la campaña, así como de todas las labores técnicas del proyecto”, ha explicado Javier navarro.
Las brigadas Forestales se ponen en marcha en base al Plan de Empleo Forestal Local de la Junta de Castilla y León por el que la Diputación recibe una subvención para la contratación de personal encargado de las tareas mencionadas. Este año, la subvención ha aumentado hasta los 340.000 euros. Por su parte, la Diputación provincial afronta otros gastos como dotar de vehículos u otras herramientas a las brigadas.
Además, en colaboración con la Junta de Castilla y león se realizan actuaciones, especialmente de limpieza en áreas recreativas que se localizan en los montes que pueden ser un foco importante de incendios.
En este sentido, este año, se han limpiado cuatro puntos en la zona de Almazán, cinco en la comarca de Pinares y 11 en la zona de Almenar.
“Este año debido a las condiciones climatológicas y al confinamiento impuesto por el Decreto de Alarma, el trabajo es especialmente intenso”, ha puntualizado la Vicepresidenta Segunda de la Diputación provincial, María José Jiménez.
