Autoridades como el presidente de la Diputación César Rico asistió ayer a la jornada festiva de Canicosa de la Sierra que conenzó con la misa en la ermita. Acto seguido tuvo lugar un concierto de la Coral Comarval de Pinares.
Momentos después de la finalización del concierto, comenzó la procesión en la que se dan tres vueltas a la ermita portando la imagen de la Virgen. La fiesta continuó con la exhibición de grupos de danzas populares.
Momentos previos a la comida campestre en compañía de amigos y familiares, dio comienzo el reparto de pan, vino y queso entre todos los asistentes para celebrar la tradición ancestral conocida como Solaz, un rito con cientos de años de historia que se mantiene vivo gracias a los integrantes de una peña que lleva más de 30 años entregando estas viandas.
Se trata de la peña ‘El Carrascal’ que en esta edición fue la encargada también de dar el pregón en la jornada del viernes e inaugurar las fiestas en Canicosa de la Sierra.
Al término de la comida campestre, los vecinos de Canicosa de la Sierra procedieron a la lectura del Libro del Carrascal, otra de las costumbres que no se pierden y en la que, además de detallar por escrito todo lo acontecido en la jornada, se nombran nuevamente prior y mayordomos de la cofradía. Los vecinos de Canicosa completaron la tarde con el descenso hasta el pueblo culminando la jornada con la verbena en la plaza mayor.
Canicosa retomará los festejos este fin de semana con la tradicional caldereta que se celebrará este sábado 22
