La última campaña de excavaciones en San Pedro de Arlanza, en el término de Hortigüela, ha concluido con el hallazgo de los cimientos y restos de la muralla medieval que rodeaba al monasterio.
El lienzo de muralla ahora descubierto se ubica en el sector noroeste. Tiene cerca de un metro de espesor y cuenta con un vano que daba acceso directo a la iglesia, y que, posiblemente, estuviera abierto en el momento en que el templo asumió las labores parroquiales.
Con este descubrimiento, se confirma la veracidad de un manuscrito de 1.563, ya desaparecido, que hacía referencia a la existencia de una muralla medieval con cinco torres. Estas eran la de Fray Pelayo en la zona occidental, la de Doña Sancha en el extremo suroeste, la del Tesoro en el norte y las del Capítulo y del Conde en la fachada este. Las sucesivas reformas provocaron el abandono del edificio y el borrado parcial de su trazado.
Tras terminar el trabajo de campo, arranca ahora la fase de laboratorio para analizar los resultados preliminares y para estudiar en detalle los restos arqueológicos recuperados, con materiales que proceden de los siglos XIII y XVI
Estas actuaciones forman parte del proyecto arqueológico global que el Instituto del Patrimonio Cultural de España, con el Ministerio de Cultura y Deporte, está llevando a cabo en el monasterio desde 2021 y que tuvo como punto de partida la fotogrametría aérea y la prospección geofísica.
En 2022, ya se actuó sobre la antigua hospedería del monasterio.
