La cofradía de San Sebastián de Covaleda vivirá otra vez su día más señalado del año sin actos por culpa de la pandemia. La prudencia es lo que prima en estos momentos y desde la cofradía se ha decidido la suspensión total de la programación que normalmente se hacía en este día tan señalado. “Por segundo año consecutivo no tendremos ningún acto, es lo que toca en estos tiempos en los que hay que esperar, ya que la salud es lo primero”, señala Conchi Martínez, integrante de la Cofradía, recordando esos años pre-pandemia en los que este día era uno de los más esperados del año, “era una fiesta muy especial para todos nosotros y solo esperamos que al próximo año podamos vivirla por fin”.
Solo la misa que el domingo 23 de enero ofrecerá el párroco Jesús Mendoza en la iglesia parroquial será el único acto ligado a San Sebastián. Tendrá lugar a las 13 horas del mediodía y no se acudirá de forma oficial desde la cofradía, sino el que quiera de forma particular. Pero echando la vista atrás, hay que recordar cómo era este día para Covaleda y más concretamente para los integrantes de la cofradía de San Sebastián, en torno a medio centenar de hermanos y hermanas. El primer acto era pasar lectura de la asistencia de todos los hermanos, para después realizar la procesión desde la Plaza Mayor hasta la iglesia parroquial con la compañía de la Agrupación Musical Santa Cecilia. La jornada se completaba con la cena y el baile en el salón del Ayuntamiento. Además, tenía lugar una tradición muy bonita: el baile de la Jota de Covaleda y la compra y posterior subasta del pan sobrante de la cena