Jóvenes y mayores cumplieron en la jornada del sábado 29 de abril con la tradición de la pingada del Pno Mayo en Rabanera del Pinar, tras su tala, arrastre y traída desde el monte.
Con el empuje y tesón de todos, se logró levantar el pino en el lugar de costumbre, y ante la expectación popular, para un rito que se revive con gran ilusión, y con el que los mayores recuerdan la vinculación al monte que siempre ha tenido la localidad.
Ahora Los Mayos, las marzas hace dos meses, las fiestas de verano, el folklore y la feria hacen de Rabanera un punto de encuentro con actividades diversas a lo largo del año.