El día 12 de diciembre habrá una concentración con el lema “ NO al Cierre de Iberdrola-Salas” a las 13:00 horas en la sede de Iberdrola en la calle Palacio, Salas de los Infantes. La noticia del cierre de las oficinas de Iberdrola en Salas de los Infantes ha corrido como la pólvora entre sus habitantes ya que supone la despedida de un grupo de vecinos que han formado parte de esta comunidad durante un largo periodo de tiempo. Consultado pocos días antes del cierre de las oficinas alguno de estos trabajadores, nos comunica que ya disponen de una nueva ubicación laboral y que desconocen de donde surgió la iniciativa para realizar una concentración en repulsa a este cambio estratégico de la compañía. A fecha actual el funcionamiento de la oficina en Salas es normal hasta el momento de cierre.
Se trata de los 7 profesionales que se encargaban del mantenimiento y averías en esta zona de la provincia, implicando también un cambio de residencia; 2 a Aranda de Duero, 3 irán destinados a Burgos, otros 2 a Valladolid, lo que supone una pérdida de población del entorno rural nuevamente en beneficio de lo urbano, ya que todos ellos estaban integrados como vecinos en Salas o sus proximidades, una pauta que nada tiene que ver con la consigna dada desde el gobierno nacional para reforzar y evitar el abandono de las zonas rurales. Esta medida tomada por Iberdrola choca con los planes generales a demás de prescindir de un equipo laboral que residía cerca del lugar de trabajo donde podían surgir los incidentes, para así actuar en el menor tiempo posible.
Desde la compañía confirman que se está realizando estos traslados de la plantilla en Salas de los Infantes como respuesta al proceso de automatización y digitalización de su red eléctrica. Explican que los 7 trabajadores de Salas con los puestos de 1 encargado y 6 oficiales son hombres y menores de 40 años.
El alcalde de Salas Francisco Azúa, respondió a esta decisión de Iberdrola con varias frases que indicaban su gran malestar. «Es una auténtica vergüenza lo que Iberdrola está haciendo con los pueblos, por ahorrarse un poco. La multinacional lo que hace es dinamitar el medio rural». Azúa lamenta que se pueden llegar a desestabilizar los lazos familiares, ya que algunos trabajadores, sus parejas desarrollan su actividad laboral en Salas y sus hijos acuden al colegio.
Desde la empresa se insisten que con los niveles de automatización de la red se detectan las incidencias y se actúa de forma autónoma para aislarlas en los primeros instantes. Por lo que ya no hay necesidad de intervención humana. Esta claro que la compañía valora principalmente el redito económico al beneficio humano, habrá que ver como se resuelven las incidencias propiciadas por las inclemencias climáticas con la automatización que propone la empresa. Desde la compañía explican que a partir del momento de cierre de las oficinas en Salas se reforzará la operación y mantenimiento desde los centros que se encuentran en Aranda, Burgos y Soria. Al margen de las inversiones en la automatización de la red algunos usuarios de la zona han mostrado ya su preocupación por esta medida al creer que los tiempos de respuesta ante una avería o apagón van a ser mayores.
