Cuando uno atraviesa el núcleo de Huerta de Arriba en dirección a Neila tiene la sensación de hacer un viaje a ninguna parte. Sin embargo, es un trayecto en medio de una naturaleza salvaje, entre pinos y el agua que desciende de las Lagunas de Neila. Son once kilómetros los que separan ambas poblaciones, y ninguna administración parece tener responsabilidad sobre este trayecto.
Las últimas nevadas han dejado impracticable el recorrido para el tráfico de vehículos. En estas semanas no ha pasado una maquina quitanieves, y sólo los muy osados, como servidor, se han arriesgado a abrirse camino con un turismo por lo que, se supone, era la carretera, cubierta por un manto blanco de nieve y escondiendo la presencia del hielo.
Fue en noviembre de 2021, cuando representantes de los ayuntamientos de Neila y Huerta de Arriba estuvieron en la Diputación Provincial de Burgos y la Delegación Territorial de la Junta en la ciudad para buscar la implicación de ambas administraciones en el mantenimiento de la carretera que une los dos municipios.
El tramo de carretera de montaña se viene considerando una pista forestal, que se volvió a hacer imprescindible para las comunicaciones tras el socavón registrado en la BU-822, que une Neila con Quintanar de la Sierra, que obligó al desvío del tráfico por esta otra zona.
“Pronto se les ha olvidado que es importante tenerla limpia”, comenta un vecino de Neila, a lo que añade que “en este pueblo estamos abandonados, nadie nos atiende”.
La intención de los ayuntamientos es que la carretera forme parte de la Red autonómica, pero como saben que será un proceso largo, esperan también que la Diputación Provincial pueda asumir entre tanto competencias, entre ellas la retirada de la nieve,.