Hasta ahora, invictos al llegar al desempate. Iban tres, los tres vencidos, y llegó el cuarto, también al zurrón, para tener la sensación de haber ganado un punto tras todo lo vivido en un partido trepidante. El nivel de Unicaja Costa de Almería fue el de un Grupo Herce Soria que llegó al Moisés Ruiz segundo clasificado, en los dos primeros sets, y eso es decir mucho, ambos finalizados en 26-24. Después se cayó en rendimiento, algo que no se puede permitir ningún equipo frente al cuadro soriano, incansable defensor y de poder atacante temible. Había que volver a la vida, y se hizo, espoleados por la afición verde.
Y sí, de tener la posibilidad de sumar tres puntos se pasó a pensar que el botín se iba a quedar en solo uno para finalmente conseguir dos, vitales en la pelea para la clasificación hacia el playoff. Pero, mucho más allá de lo cuantitativo está lo cualitativo, puesto que el triunfo frente a un rival tan estable y solvente como el de Alberto Toribio invita a creer y a crecer. A tener en muy presente es que se consiguió vencer a uno de los grandes sin un opuesto nato, primero Aleix Tarrazo, central, como en todo este tramo de la temporada desde la Navidad, y después, as en la manga de Pablo Ruiz, Jorge Fernández, clave.
El máximo anotador del encuentro fue Bruno Cunha, con 24 puntos, seguido por Olalla, que hizo 23, ambos seguidos por Charly Jiménez, con 22, determinante el alicantino para anotarse el segundo set. Tuvo mejor rendimiento en ataque el cuadro soriano, pero hubo mayor volumen ahorrador, muy fuerte el equipo celeste en bloqueo llegando hasta los 18 puntos, siete para Flores. En saque, tres puntos directos lograron los ahorradores, dos de Paulo Renán, por uno de su rival. En lectura de números, fue mejor Grupo Herce Soria, incluso en puntos totales del partido, haciendo 14 más que Unicaja Costa de Almería.
El primer set comenzó con dudas sorianas y un 5-1, con dos saques directos de Paulo Renán, que obligó a Toribio a pedir tiempo muerto. A la vuelta mejoraron las prestaciones de su equipo, que poco a poco fue recortando ante el acierto en ataque Charly Jiménez, nivelando el set a once puntos. Se empezaba de nuevo y hasta llegó el adversario a tener dos de ventaja (14-16), pero Borja Ruiz tiró del equipo y Charly Jiménez insistió en que ese iba a ser su mejor partido del curso (18-17). Con todo, había mucho que pelear y los sorianos apretaron, llevando un paso por delante ya dentro de la veintena.
Un bloqueo de Jorge Fernández igualó a 23, Borja Ruiz aprovechó un penalti y dio punto de set, aunque fue al segundo cuando se cerró la manga en ataque de Charly (26-24). A la vuelta se comenzó en mayor igualdad, pero pronto los verdes rompieron el set para un tanteo de 8-4 en pleno ‘trance’ de Charly Jiménez. De nuevo Grupo Herce Soria siguió a lo suyo, trabajando, y, como en el primero, niveló la contienda 11-11. En esta ocasión no se cedió a la delantera visitante y los ahorradores se marcharon de cuatro puntos que ya parecían definitivos con sendos bloqueos de Tarrazo y Jorge (22-18).
Entonces entró en cancha Aulisi, que desde el saque cambió la dinámica y dio otro aire a los suyos, hasta el punto de hacer un parcial de 0-5 para el 22-23. Tuvieron una bola de set los castellanos, pero Charly bordó su actuación con los dos últimos puntos para el 26-24 definitivo. En total igualdad, ante un grande, el equipo había crecido en confianza muchos enteros, pero de seguido la perdió bajando enormemente su rendimiento en los dos siguientes sets. Grupo Herce Soria se limitó a ser fiel a si mismo y a dar una lección de defensa, situación del juego desde la que lograron empatar el encuentro a dos sets.
Olalla fue clave para los suyos y tras un claro 17-25 las cosas no cambiaron en la cuarta manga. El receptor soriano continuó con su excelente rendimiento y desde el principio se acabó la lucha cuerpo a cuerpo (3-6 y 4-11, con ace de Arjones). Juanmi intentó que los verdes no se desengancharan, pero el choque estaba destinado a un tie-break en el que la gran incógnita estaba en si Unicaja Costa de Almería iba a ser el del principio. Así fue, y tras un 2-0 e igualdad de nuevo, se tuvo el carácter de nivelar un 5-7, con Borja Ruiz a lo capitán (saque directo incluido).
Soria se mantuvo punto por delante hasta que Juanmi firmó el 13-12, aunque los sorianos dispusieron de hasta tres bolas de partido. Se peleó, se creyó y se logró levantar las tres, hasta tener otras tantas a favor con el protagonismo de Jorge Fernández como opuesto. El movimiento táctico de Pablo Ruiz fue determinante para darle la vuelta a la situación y finalmente alcanzar la victoria por 20-18. El Moisés Ruiz siguió siendo un fortín en esta segunda vuelta de la fase regular, Unicaja Costa de Almería suma 26 puntos y se acerca al objetivo de estar otro año más en la lucha por el título de la Superliga.
