El conjunto dirigido por Carlos Aguilera regresó a los entrenamientos como equipo de Segunda RFEF, un premio ganado a pulso sobre el terreno de juego. Una oportunidad ilusionante y un reto que el grupo asume con responsabilidad.
«Conseguimos el ascenso en una situación complicada y vivimos algo muy bonito en la segunda mitad de la pasada campaña», recuerda el entrenador, quien transmite las «ganas» del vestuario.
La entidad de Castañares se adentra en terreno ignoto. Da el salto a una categoría superior y asume que la capacidad de adaptación será la clave para su supervivencia. «Jugaremos ante clubes míticos e históricos de la Segunda División B, equipos que tienen experiencia en este nivel. Debemos estar preparados porque ellos tienen oficio y dominan la situación», advierte el preparador.
En estas circunstancias, cada detalle cuenta y Aguilera tiene en cuenta el estilo de juego que se encontrará el Promesas en este curso. «Competiremos con vascos, navarros, cántabros y riojanos. Es un fútbol diferente al que estábamos acostumbrados en Castilla y León, que es más combinativo. Ahora veremos a equipos más directos», señala.
La actualización del convenio suscrito con el Burgos CF y la normalización de las relaciones entre ambos clubes tiene su impacto directo en el desarrollo del proyecto. El Burgos Promesas defiende su «prestigio» en el estreno en la nueva categoría y, además, acepta el reto de servir de puente con el bloque de Segunda División. «El conjunto de Segunda RFEF tiene su labor y no es fácil. Es importante tener jugadores con jóvenes y facilitar su progresión al primer equipo mientras buscas la continuidad en la categoría. Por eso también incorporamos gente con experiencia», explica.
Jugadores como Gabri, Soto, Barahona, Sergio Esteban, Mota o Dani Burgos «mantienen la base formada por gente de aquí, que conocen la casa y la forma de trabajar». Eso sí, «quedan refuerzos por traer en busca del equilibrio que aportan los sub23 con hambre de mejorar y los futbolistas con experiencia». El central Javier Sahuquillo (Conquense), el portero Jorge Jiménez (Internacional de Madrid), el centrocampista Abel Conejo (Zamora) y los extremos Juan Carlos Pineda (Mirandés B) y Raúl Pescador (Deportivo B) forman en este momento la lista de fichajes, altas que se suman a la renovación de Nacho Heras.
Además, la continuidad de Iván Serrano, la presencia del portero del Burgos CF Óscar López y la aportación de juveniles como Pol Bassas, también dan forma al futuro bloque.
Aguilera cuenta con alrededor de 17 futbolistas en el inicio de curso. El número concreto dependerá de los próximos movimientos en el mercado y de los planes del entrenador del Burgos CF, Julián Calero, con aquellos juveniles y el resto de jugadores que pertenecerán al cuadro de Segunda RFEF.
