La prueba volvió a proponer un terreno ondulado y una fuga que fue protagonista la primera mitad de la carrera. Sin margen, con este intento controlado por los esprinters, todo quedaba para decidirse en la parte final. Pero los morados quisieron probar fortuna y aprovecharon los movimientos en la última cota exigente para lanzar por delante a Juan Antonio López-Cózar en un movimiento sin margen por parte del grupo principal.
Una vez junto de nuevo el pelotón, todo se decidió en una llegada masiva con Manuel Peñalver como hombre rápido, pero perjudicado por un enganchón que le dejó sin opciones pese al buen trabajo de todo el equipo. Aún así, pudo mostrar su buen estado físico con dos opciones aún por delante. Con el apoyo de los compañeros, y la velocidad y fuerza que ya ha demostrado el alicantino, la opción de brillar es un objetivo realista.
Este jueves, 188 kilómetros entre Rosport y Diekirch con cuatro cotas puntuables volverán a exigir bien a los aventureros, bien a los ciclistas potentes que quieran probar suerte al esprint en la línea de llegada. Todo ello siempre con la vista puesta en la contrarreloj del viernes, decisiva para la general.