La primera etapa de la VI Vuelta a Burgos Femenina (20 al 23 mayo) dará protagonismo al Geoparque de las Loras, uno de los patrimonios naturales de la provincia de Burgos que fue incluido en la red de geoparques de la Unesco en 2017.
La primera dificultad montañosa de la carrera, el Alto de Coculina, llegará en el kilómetro 53,5 de una etapa en la que, a falta de seis kilómetros para el final, las corredoras deberán superar el Alto de la Lora.
La primera parte de la etapa no tiene especiales dificultades en cuanto al recorrido y servirá para que las ciclistas, entre las que se espera la presencia de las mejores corredoras del pelotón internacional, suelten los nervios propios del primer día de competición.
Desde Villadiego, la carrera dará una vuelta por las localidades de Arenillas de Villadiego, Villaute, Las Hormazas, Tobar, Cañizar de Argaño y Olmos de la Picaza para regresar al punto de partida.
La aproximación al Alto de Coculina se hará por Bruelles y Coculina y, una vez coronado, la carrera tomará dirección a La Nuez de Arriba, Sedano, Covanera y San Felices, en donde comenzará la subida al Alto de La Lora, ubicado a solo seis kilómetros de la línea de meta.
La Vuelta a Burgos Femenina, que al igual que su edición masculina organiza la Diputación de Burgos a través del Instituto para el Deporte y Juventud (IDJ) se estrenará este año en el calendario WorldTour de la UCI, la máxima categoría del ciclismo mundial.
La prueba, se disputará sobre cuatro etapas en línea en la que destaca por encima de todas la cuarta, última y definitiva que finalizará en Las Lagunas de Neila, puerto de Categoría Especial y un final clásico en la Vuelta a Burgos masculina desde el año 1985.
