No fue el mejor encuentro de los sorianos esta temporada y aunque la derrota hubiera sido del todo inmerecida por lo que se vivió en el Vicente del Bosque, el Numancia volvió a demostrar que compite siempre ante cualquier rival y que se adapta a cualquier contexto y superficie, por complicado que sea.
Javi Moreno recuperó la fórmula de los tres centrales para este partido, físico y trabado como pocos, en una instalación municipal de hierba artificial y dimensiones más bien reducidas. En este tipo de contextos pasan muchas cosas a lo largo de noventa minutos y la concentración es vital para evitar situaciones comprometidas y minimizar riesgos.
En esta ocasión, entre el terreno de juego y el rival, que todavía no conoce la derrota en su feudo esta temporada liguera, el partido resultó más que complicado, a pesar de que el Numancia fue mejor y tiró más a puerta que el conjunto madrileño. Aún así, Kudakovskiy resultó salvador en los primer minutos de partido, pues el meta ruso realizó hasta tres intervenciones de muchísimo mérito en sendos fogonazos del cuadro local. Más mérito tienen sus paradas cuando desde nada más iniciarse el encuentro se lesionó el hombro en una disputa con un rival y aunque aguantó los primeros cuarenta y cinco minutos, fue sustituido al descanso por Dorronsoro. El veterano guardameta rojillo dio el testigo a Kuda y una gran intervención en el minuto final del partido también evitó una derrota que hubiera sido tan injusta como dolorosa, porque el Numancia también las tuvo claras, sobre todo en el primer acto.
Carlos González remató al poste y Lupu no pudo conectar bien el balón en la primera gran ocasión rojilla del partido. La acción, había venido precedida unos minutos antes por un posible penalti sobre el delantero canario del Numancia que ni el árbitro ni el asistente quisieron ver ante la petición de la grada, más numantina que nunca en la mañana madrileña del Barrio del Pilar.
Después, fue Diamanka el que inició una jugada por el centro, que abrió a banda izquierda y buscó el remate tras el centro de Bonilla, pero Adrián Fernández hizo la parada del partido para negarle el gol a Pape. Un par de remates aéreos más tras sendas jugadas de estrategia no dieron para más y el partido se marchó al descanso tal y como se había iniciado.
La segunda parte arrancó con el Unión Adarve contestón y con un Numancia que necesitó asentarse tras las tres cambios realizados por Javi Moreno en el descanso -dos de ellos por lesión de Kudakovskiy y Vicario, y uno por amonestación, pues Diamanka vio la amarilla demasiado pronto-. Tras ajustarse en el campo, los sorianos volvieron a tener el balón, pero el juego resultó muy directo, de un área a otra y ahí dominaron casi siempre los defensas.
En una buena conducción de Carlos González, Miñambres, sobreexcitado todo el encuentro, le cazó por detrás y el árbitro le enseñó la cartulina roja directa, dejando al cuadro local con diez jugadores a cuarenta minutos para el final.
El Numancia intentó manejar esa superioridad numérica en el campo, pero se excedió en el juego directo y le faltó pausa para manejar la pelota y buscar esa superioridad. El Unión Adarve estuvo valiente, y aunque defendió mucho más que atacó, mantuvo una línea con tres puntas que resultó un quebradero de cabeza para la defensa numantina en las transiciones locales.
Precisamente, en una falta lateral llegó el tanto local. El golpeo de la pelota parada conllevó un rechazo y una posible mano de un rival, pero el balón le cayó franco, perfecto para el remate y batir a Dorronsoro muy cerca de la línea de gol. Quedaba poco más de un cuarto de hora y al Numancia no le quedó más remedio que quemar todas su naves.
Encontró el peligro por la banda derecha del ataque numantino generando superioridad con Soler y Rubén Sanchidrián, pero sus centros no encontraron rematador. El partido se igualó en otra jugada de estrategia. Bonilla puso un buen balón en el corazón del área y Lupu entró con todo y cabeceó de forma espectacular a las mallas, estableciendo el empate a cinco minutos del final. Los de Javi Moreno lo intentaron hasta el límite, y una conducción de Soler y un disparo de David Sanz desde la frontal pudieron haberle dado la vuelta al partido, pero no pudo ser y el 1-1 reinó en el marcador final.
Unión Adarve: Adrián Fernández, Meseguer, Alfredo Sotres, Juanma, Miñambres, Iván Sánchez, Alex Ortolá, Albur, Nouaman Arkine, Fernado Harta y Fran García.
C.D. Numancia: Kudakovskiy (Dorronsoro, minuto 46), Bonilla, Vicario (Soler, minuto 46), De Frutos, Moustapha, Lupu, Carlos González, David Sanz, Zubiri, Diamanka (David Alfonso, minuto 46 (Oscar García, minuto 69) y Grande (Rubén Sanchidrián, minuto 60).
Árbitro: Dirigió el partido Javier García Rubio. Asistido por Julián Sánchez García y Guillermo Ciruelos Esteban. Mostró cartulina amarilla a los numantinos Vicario, Moustapha, David Sanz, Diamanka y David Alfonso y a los locales Meseguer, Iván Sánchez y Hakim. Expulsó por roja directa a Miñambres en el minuto 51.
Goles: 1-0. Minuto 76. Fernando Harta. 1-1. Minuto 85. Lupu.
Instalaciones: Vicente del Bosque. Más de 300 numantinos en las gradas.