El partido, que quedó aplazado en enero por una situación de COVID-19 en el cuadro canario, se presenta para los de Paco Olmos como una oportunidad de dar un paso adelante en el camino hacia la permanencia en acb. Los castellanos son conscientes de que afrontarán un duro choque ante el conjunto claretiano, que visitará el pabellón burgalés en su mejor momento de la temporada.
“Es un partido importantísimo que los demás equipos ya han jugado”, ha analizado el entrenador Paco Olmos en la previa del partido, que ha explicado: “Después de mañana nos vamos a poner toda la parte baja con el mismo número de partidos. Somos el único equipo que tiene la oportunidad de poder llegar a la novena victoria en este momento de la competición. Ojalá podamos dar ese paso más en la lucha que va a haber hasta el último día”.
La presente semana llevará a los burgaleses a afrontar una doble jornada, en la que competirán mañana jueves en casa y el próximo domingo en Lugo. Pese a ello, el técnico valenciano quiere que sus pupilos continúen disputando la competición “partido a partido”, por lo que ha apuntado: “Ahora mismo es todo Gran Canaria. Eso es lo que estoy intentando transmitir al equipo”.
Sobre este compromiso por partida doble de la semana, el entrenador de los castellanos ha expuesto: “Intentamos tener una buena planificación para que el equipo llegue a tope. La buena noticia es que están todos para jugar”, a excepción del base Ali Nikolic, que sigue trabajando para recuperar su lesión en la cadera.
En cuanto al rival de mañana, Olmos ha recalcado: “Gran Canaria me parece un equipazo. Están en su mejor momento de la temporada”. Los de Porfi Fisac visitarán el Coliseum desde la novena posición de la clasificación, con un balance de 12 victorias y 12 derrotas. Después de haber caído en un par de encuentros de Liga Endesa, los claretianos se hicieron con el triunfo en el derbi canario ante Lenovo Tenerife de la última jornada (89-77). Ahora, llegan a Burgos tras haber disputado un partido de Eurocup frente a la Virtus Bolonia, en un duelo que perdieron, pero en el que dispusieron de la opción de haberse llevado la victoria (70-68).
En las últimas semanas, Gran Canaria ha reforzado su plantilla con la incorporación del base Kenny Chery y el retorno del pívot Olek Balcerowski. El técnico del Hereda San Pablo Burgos ha definido al equipo canario como una “plantilla muy larga y muy grande”, por lo que se plantea un partido complicado en el Coliseum.
Entre los nombres destacados, sobresalen la figura de Dylan Ennis (14,9 puntos y 12 créditos de valoración promedio), la labor reboteadora de John Shurna (4,4) y Artem Pustovyi (4,0), o las asistencias de la pareja que forman Andrew Albicy (4,3) y AJ Slaughter (3,6). Será también un partido de reencuentros en lo que respecta a los jugadores, con el regreso de Miquel Salvó y de Oliver Stevic a la pista castellana, además del enfrentamiento de Xavi Rabaseda ante uno de sus exequipos.
“Tenemos que hacer un partido durísimo”, ha advertido Olmos, que ha referido que será “importante la entrada en el juego”, en un encuentro que se prevé con “mucho desgaste físico”. Entre las claves para optar a la victoria, se sitúan los rebotes y las pérdidas, estas últimas serán “una estadística fundamental” ante uno de los equipos que más balones recupera de media en la Liga Endesa (8,46 por partido).
En líneas generales, el técnico del cuadro burgalés ha expresado: “Porfi (Fisac) ha dado con la tecla para hacer este año el baloncesto que a él le gusta. Pasaron algún momento de altibajos, pero se les nota que están preparados para el momento importante. Deberemos hacer nuestro mejor partido”. Para llevar a buen puerto ese objetivo contarán con el ánimo de la grada local, un añadido a la hora de encarar el duelo: “Sabemos que tenemos el plus de jugar en casa. Para aprovecharlo, tenemos que hacer nuestro trabajo”. El partido entre el Hereda San Pablo Burgos y Gran Canaria arrancará este jueves, a las 20:30 horas, en el Coliseum.
