La tarea no será sencilla, puesto que los pupilos de Paco Olmos deberán realizar un buen papel en una de las pistas más exigentes de la competición, ante un recién ascendido que se ha mostrado como uno de los equipos revelación de la temporada.
El duelo de mañana se vivirá en unas circunstancias inusuales, puesto que el entrenador del Hereda San Pablo Burgos regresará a la que fue su cancha como local durante la primera mitad de la presente temporada. No obstante, esta situación no deberá afectar al desempeño del cuadro burgalés, que espera disponer de “la fuerza mental, la energía y el baloncesto para desarrollar el partido”, señalaba Olmos en declaraciones previas al choque. El técnico añadía: “Tengo que intentar abstraer a mi equipo de la situación, estar preparados y poder anticiparnos a todo lo que pueda haber”.
El primero en realizar ese ejercicio de abstracción será el propio entrenador, que confía en que el ambiente que se dé en el pabellón lucense “no nos afecte, ni para bien ni para mal”. El preparador valenciano recordaba: “Cuando hay ambientes así fuertes -y ya de por sí el ambiente del Pazo es uno de los más fuertes de la Liga Endesa, por eso es un fortín para ellos-, ni tiene que afectar para estar más concentrado, ni te tiene que hacer perder la concentración o la motivación”. Todo lo que rodea al encuentro hace que vaya a haber “muchos factores que controlar dentro del partido”, por lo que Olmos intentará “que el equipo esté solo centrado en su trabajo”.
La expedición del Hereda San Pablo Burgos partió a primera hora de la tarde del viernes hacia Lugo, donde realizaron un pequeño entrenamiento de recuperación y donde tenían programada una sesión matinal este sábado. Si no hay contratiempos de última hora, todos los jugadores estarán a disposición de los técnicos para comparecer mañana, a excepción del base Ali Nikolic, que viajó a tierras gallegas, al igual que lo hizo Ken Horton, ambos para avanzar en sus respectivos trabajos de recuperación y fortalecer el vínculo del grupo.
El Río Breogán recibirá al conjunto castellano desde la décima posición de la clasificación en la Liga Endesa, con un balance de 12 victorias y 13 derrotas. El cuadro que dirige Veljko Mrsic llega al choque después de haberse llevado el triunfo en el derbi gallego ante Monbus Obradoiro (80-78), gracias a una canasta de Dzanan Musa prácticamente al término de la contienda.
El joven alero bosnio es, precisamente, el más destacado del plantel breoganista: es el jugador más valorado de toda la Liga Endesa (22,3 créditos de media) y es el máximo anotador de la competición (20,2 puntos). “Musa ha sido el impacto de la acb. Creo que va a ganar con todo merecimiento el MVP”, recalcaba Olmos en sus declaraciones, que agregaba: “Lo conozco bien y, como él mismo se expresa, él solo no podría ganar a ningún equipo de la acb”.
Junto a Musa, aparecen otros destacados en el equipo del Río Breogán: Tyler Kalinoski, el quinto en triples anotados por partido (2,3); Rasid Mahalbasic (11,9 puntos y 5,7 rebotes de media) o Trae Bell-Haynes (13 puntos y 4,1 asistencias promedio). Además del regreso de Paco Olmos a Lugo, un exjugador del Hereda San Pablo Burgos se verá las caras con los que fueron sus compañeros en el pasado curso, el pívot Jordan Sakho, que ahora viste la camiseta celeste.
El entrenador del cuadro burgalés afirmaba que lo que sobresale del Río Breogán es su condición de “equipo” en una campaña de Liga Endesa en la que “se ha demostrado sólido, sobre todo, cuando juega en el Pazo, donde casi todos los partidos los cuentan por victorias”. Olmos recalcaba: “Más allá de hacer un buen estudio del rival, nosotros tenemos que estar preparados para levantarnos de la derrota dolorosa ante Gran Canaria y estar con los cinco sentidos en un nuevo plan de partido para poder ejecutarlo”. El encuentro entre el Hereda San Pablo Burgos y el Río Breogán se disputará este domingo, a partir de las 12:30 horas, en el Pazo dos Deportes de Lugo.