Con el viento de cara, un kilometraje elevado y la jornada casi perfecta para un final al esprint, solo los más valientes se animaron a probar la fuga. Ahí estaba Jetse Bol, un ciclista que sabe cumplir su trabajo y cuando emprende una aventura la lleva lo más lejos posible. Así, pese a los apenas 4 minutos con los que llegó a contar la escapada, Bol se mantuvo incluso en solitario, ya en la parte final, para dar vida a la undécima etapa de La Vuelta.
En la parte final, llegando a Cabo de Gata, su intento fue neutralizado y los esprinters se jugaron la victoria. Fue un día para que el resto de morados recuperase, guardase fuerzas. Siempre con la vista puesta en una segunda semana a la que le restan muchas jornadas duras, y que entra en Andalucía para no abandonar ya la Comunidad Autónoma hasta la próxima semana. De momento, Jetse Bol ya ha demostrado que la actitud y garra de Burgos BH no cambia. Siempre Valientes.
Jetse Bol: "Al final, somos los equipos invitados los que animamos la carrera. Lo hemos intentado, lástima que tuvimos viento de cara y era difícil hacer camino pero lo seguimos intentando. ¡Nada es imposible! Eso desde luego".
Este jueves la carrera afronta entre Salobreña y Peñas Blancas una jornada unipuerto que marcha junto a la costa con un constante sube y baja, para afrontar en la recta final de sus 193 kilómetros una ascensión de casi 20 kilómetros y que puede marcar diferencias en la clasificación general.