Una vez superado el primer periplo en España, con un balance exitoso de cuatro victorias en cinco carreras, el Burgos BH vuelve a Centroeuropa para correr entre las cintas de los circuitos belgas. El campeón de España reconoció al final de la carrera en Villarcayo que las competiciones en casa fueron el escenario idóneo para disfrutar y ganar “ritmo y chispa de competición”, a modo de preparación de los próximos objetivos y carreras de máximo nivel.
La primera cita de esta semana es esta misma tarde en Ardooie, y presenta un circuito sencillo sin obstáculos pero con varios tramos llanos que impedirán abrir grandes diferencias y pequeñas subidas. El sábado, Felipe Orts viaja a Ruddervoorde para disputar la segunda prueba de la Telenet Superpresetige, en la que el corredor fue séptimo en su última edición. En este caso, se presenta un trazado muy sinuoso con colinas y un banco de arena de casi 100 metros.
El fin de semana concluye en Zonhoven, donde el ciclista morado disputará su primera prueba de la Copa del Mundo de la temporada. El circuito es muy exigente, con mezcla de zonas más llanas y técnicas con un tramo de arena que se pasa de forma ascendente y de descendente y que enlaza con una zona de subidas cortas pero empinadas.
Felipe Orts: "Empezaremos fuerte en Ardooie. Creo que va a faltar gente que viene de competir en Estados Unidos, así que será una buena oportunidad para sumar un buen resultado aunque el circuito no favorece. En Ruddervorde tengo el buen sabor de boca del año pasado, pero el mal tiempo cambiará mucho el recorrido. Por último, siempre es especial afrontar la Copa del Mundo y Zonhoven repartirá muchos puntos. Espero que podamos sumar un buen balance de estas tres pruebas".
