El Moisés Ruiz resulta determinante para obrar una remontada muy complicada y conseguida como un verdadero equipo, siendo claves todos los componentes del plantel, en perfecta comunión con la grada. Podría haber pasado cualquiera de los dos equipos, ambos ‘despedazándose’ en la pista, pero Unicaja Costa de Almería acudirá a su cita habitual con la historia. Los ahorradores, superando momentos en los que su continuación en la Superliga 20/21 pendía de un hilo, estarán entre los cuatro primeros, como siempre antes desde el año 1991. Enorme adversario Río Duero Soria, cuya progresión a lo largo de esta temporada ha sido extraordinaria, se ha tenido que dejar todo sobre la pista en dos auténticos partidazos en los que ha ganado el voleibol. Aprendiendo mucho de todo lo planteado por lo sorianos, los verdes salen reforzados y disputarán la semifinal al mejor de tres partidos de nuevo, con una capacidad mental que no se ha tenido en los meses anteriores. Es lo que tiene luchar del modo que se ha luchado contra los mejores, metiendo en esa catalogación al equipo dirigido por Manolo Sevillano.
En cuanto al tercer partido, el que decidió entre celestes y verdes la plaza tan reñida en semis, fue de tal tensión que, por segundo día consecutivo en un fin de semana mágico, se volvió a tener la atención de todo el mundo vóley nacional y, seguro, se logró sumar adeptos a este deporte. El choque tuvo como máximos anotadores al cubano Javier Jiménez y al brasileño Pires, ambos con 16 puntos, siendo el primero el mejor sacador, registrando una marca de 4 puntos directos. Precisamente fue él quien rompió el choque en el momento idóneo para su equipo. En bloqueo, brilló un enorme Miki Fornés, con cuatro de sus doce puntos finales conseguidos a través de esa faceta del juego, más 8 ataques. El central fue el más eficiente de los verdes y el encuentro se vio marcado por el buen control general del error, en cuanto a puntos concedidos al rival. La diferencia respecto al partido del sábado radicó en una menor eficiencia con recepción negativa por parte soriana, en un contexto de problemas a la hora de controlar el saque almeriense. Con todo, igualdad máxima en casi todo.
Unicaja Costa de Almería ha sacado el máximo rendimiento de su banquillo a lo largo de fin de semana, con polivalencia de Marlon Palharini frente a la baja de un Fran Iribarne que despertó, sin quererlo, la chispa de la confianza visitante. El mejor del día de antes no podía jugar, pero sus compañeros tiraron, y de qué manera, con un posiblemente mejor papel que nunca hasta ahora de Javier Jiménez. El primer set del partido se fue hasta el 25-27 después de la marcha firme de Unicaja Costa de Almería para no ceder la delantera, toda vez que Soria comenzó dubitativo en el saque. Tras el 9-6 hubo un 11-11, seguido de 16-14, Fornés sumando a pares, y de un 17-17, con dos excesos de vista de la recepción ahorradora para conceder ace. La primera ventaja de Río Duero fue con una falta de dobles (19-20), que se hizo de dos, anulados por Colito (22-22). El opuesto, junto con Charly Jiménez, hicieron sendas igualadas a bolas de set visitantes, matada la tercera con ace de Osorio.
La segunda manga comenzó movida, con un 2-0 y luego un 3-1 por rojas a ambos bandos, volviéndose a jugar al voleibol con todo, por parte de los dos equipos, si bien con Unicaja Costa de Almería llevando la iniciativa y logrando rentas de peso, todas poco a poco controladas por Río Duero Soria (de 5-2 a 5-5 y de 11-6 con ace de Javier Jiménez, a 15-16, por la incidencia en la recepción del saque de Villalba. Una vez más había dilapidado el cuadro almeriense una cómoda situación en el set y tocaba la machada de reconducir la situación. Le correspondió a la batuta de un Villarreal que, como el sábado, resultó clave, asistiendo a Javier Jiménez, con ayuda de Fornés, más Palharino como opuesto elevando el 22-21. Villarreal precisamente fintó el 23-21y cerró el set Javier Jiménez con un bloqueo (25-22). Tras dos partidos y dos sets del tercero, se volvía a empezar la serie, el público metido en el choque al máximo llevando en volandas a los verdes en todo momento.
El tercero comenzó con Río Soria desatado (2-5), a lo que respondió Fornés y un tremendo Javier Jiménez, cuyo saque cambió el rumbo posiblemente del cruce de cuartos. Del 6-7 se pasó a un 12-7, parcial de 6-0, con dos directos en medio y con Charly haciendo de killer por cuatro, con una máxima distancia de siete puntos en el 16-9. Movió ficha Sevillano, metió en pista a las dos perlas sorianas, Lorente y Olalla, llamadas a marcar diferencias en un futuro, y logró cambiar el aire. El parcial fue de 0-5 para el 16-14, con otro tirón de Unicaja Costa de Almería para tener el set controlado (19-15), y con proximidad al final gracias de nuevo a Jiménez con su saque (22-17 con un ace). Soria creyó en su juventud y en su veteranía, con tres de la tierra, Olalla y Lorente por un lado y Salvador por otro (23-21), pero sin embargo Villarreal conectó con Charly Jiménez y el set cayó del lado local (25-21).
Por primera vez en toda la eliminatoria, Unicaja Costa de Almería iba por delante en cuanto a los sets de un partido, y lo supo aprovechar pese a que los sorianos no se vieron cortados en la euforia de sus perlas. Olalla cuajó una actuación magnífica, el opuesto firmando puntos ‘imposibles’ para sostener al equipo de su tierra, y otra vez delantera verde mediado el set, con sucesivas igualadas que iban a conducir a un final de infarto. Colito, Javier Jiménez, Vigil, Fornés, Palharini, Charly… todos en la labor, sosteniendo el pulso del choque desde el 9-9 de Olalla hasta el 20-20. Sumó Villarreal una finta para el 22-21, hubo error celeste con el 23-21 y mató rápido, tal y como tenía que ser para no dar opciones a un rival peligrosísimo, Javier Jiménez, que elevó el 25-22 con el que llegaron las lágrimas sorianas tras todo lo vivido, en un cruce de historia e histórico por todo lo aportado a este bello deporte.
Ficha técnica:
Unicaja Costa de Almería: Ignacio Sánchez, Colito, Javier Jiménez, Carlos Jiménez, Vigil, Fornés y líberos, Ferrera y Sáez. También jugaron Villarreal, Diedhiou y Palharini.
Río Duero Soria: Folguera, Osorio, Villalba, Pires, Frías, Dos Santos y líbero, San Martín. También jugaron: Izquierdo, Olalla, Lorente y Salvador.
Árbitros: Antonio Martínez y Juan Mario Bernaola.
Parciales: 0-1 (25-27). 1-1 (25-22). 2-1 (25-21). 3-1 (25-22).
Incidencias: Pabellón Moisés Ruiz, 200 espectadores. Tercer encuentro de los cuartos de final de la Superliga Masculina de Voleibol.