En esa línea de igualdad y respeto entre dos rivales que se jugaban mucho pese a encontrarnos aún mediada la primera fase, transcurrieron los primeros 30 minutos en los que ningún equipo conseguía despegarse del otro en el marcador y la alternancia en el electrónico fue una constante sin que ninguno conjunto mostrase sus debilidades al rival. Así, el partido se fue al descanso con un empate (13-13) que reflejaba bien la igualdad reinante en el Municipal.
El partido fue otro tras el descanso, tras el descanso y dominaron con firmeza un segundo acto en el que se hicieron grandes desde la defensa y maximizaron el acierto en el lanzamiento para abrir su primera gran ventaja del partido (21-17) a los 40 minutos. Por dos veces decidieron parar el partido desde el banquillo soriano viendo que la cosa se le ponía muy cuesta arriba, pero ayer se estuvo ante la mejor versión de un Teucro que no se podía permitir el lujo de relajarse si quería sumar por primera vez este curso. La ventaja no hizo más que crecer, marchándose a los once goles de diferencia y dejando en 9 el bagaje ofensivo del BM Soria en el segundo tiempo.
Los sorianos nunca estuvieron cerca de meterse en el encuentro y cayeron en la trampa de un Teucro que supo cómo jugar con la desesperación de un rival nervioso que se cansó de cometer errores y pérdidas.