El equipo que dirige Diego Ocampo se sobrepuso a la baja de última hora de Alejandro Bortolussi y doblegó a un combativo Rioverde Clavijo que nunca perdió la cara al partido pese a encajar una diferencia de veintitrés puntos. Los riojanos realizaron una gran segunda parte, consiguiendo reducir a solo cinco puntos la renta hasta que Ayoze Alonso ingresó en pista para sentenciar el partido.
Se preveía un partido muy igualado, de alto voltaje y la afición acudió en masa al Plantío para disfrutar del espectáculo, rozando los 1900 asistentes.
Ocampo había preparado el partido a mimo y la concentración iba a ser clave para sumar el triunfo ante el segundo clasificado, un Rioverde Clavijo que no reservó nada en la pista. El equipo de Jenaro Díaz, acompañado de cerca de medio centenar de seguidores, buscaba dar la campanada ante el líder de la clasificación.
La fuerte defensa y el despliegue en toda la pista iba a ser la tónica dominante entre dos rivales sumamente concentrados que no querían ceder nada al rival. En un arranque atascado de cara al aro, fue el Clavijo quien conseguía las primeras ventajas mínimas en el marcador con el tiro libre anotado por Javi Nicolau y el mate posterior de Andre Norris (2-3).
Papi Diene sorprendía al rival al transformar un triple que imponía la primera diferencia de dos puntos para los locales y la temprana entrada en pista de David Gómez descolocó el esquema del técnico visitante. Y es que el sevillano conseguía siete puntos en tan solo dos minutos en pista que elevaba el marcador hasta el 22-14 con un triple y un mate anotado por el joven cedido por el Real Betis y que obligaba a Jenaro Díaz a pedir el primer tiempo muerto del partido.
Las largas posesiones en busca de un hueco por donde encontrar el aro, hacía que el cronómetro avanzara con rapidez mientras la dirección del juego azulón pasaba a Ayoze Alonso y Joe Cremo que colocaban la barrera psicológica de los diez puntos a falta de dos minutos para acabar el primer cuarto (24-14). Sin embargo, los visitantes no perdieron la cara al partido pese a la diferencia y mediante Demian Balasko y el recién incorporado Kevin Torres, la renta disminuyó hasta los cinco puntos al final del primer acto (24-19).
El segundo cuarto decantó el partido. Los logroñeses apretaban el partido por medio de Miguel de Pablo que con cinco puntos reducía la diferencia a tan solo dos puntos en el arranque del parcial (26-24). Momento en el que el Tizona Universidad de Burgos desempolvó la apisonadora. Ocampo volvía a mover banquillo por enésima vez, continuando con su labor de alta rotación de jugadores, reincorporaba a Dídac Cuevas y David Gómez a pista, quedando libre Peter Stümer en la esquina para convertir el triple de la tranquilidad.
La fuerte defensa local, conseguía frenar a un Clavijo que comenzó a fallar y a cometer imprecisiones debido a la gran tensión y concentración local, lo que aprovechó el Tizona para volver a deshacer la igualdad.
Una primera técnica a Jenaro Díaz por protestar hacía que Rodrigo Seoane ampliara la renta hasta los seis puntos (30-24) a los cuatro minutos de la reanudación y poco después, de nuevo Stümer desde el exterior, hacía el 34-26 en el marcador, obligando una vez más al entrenador visitante a parar el partido en busca de un revulsivo.
El Rioverde Clavijo se atascó, sin ideas ante un Tizona alentado por su público y cómodo en pista, continuaba haciendo su partido y con un parcial de 11-0 imponía una renta francamente cómoda para los locales (45-26).
Sin embargo, pese a los diecinueve puntos de renta, Diego Ocampo veía puntos a corregir y tras el mate de Andre Norris paraba el partido en busca de eliminar los puntos débiles (45-28). De nuevo las defensas volvían a ahogar los ataques y tan solo el mate de Garmine Kande a falta de diez segundos movió el marcador para llegar al descanso con un cómodo 47-28 para el equipo del Arlanzón.
El paso por vestuarios animó al conjunto visitante. Después de un buen arranque de los burgaleses, que aumentaban la diferencia hasta la máxima del partido de veintitrés puntos (52-29), la defensa en zona del Rioverde Clavijo dejaba con pocas opciones a un Tizona que se atascó y no entraba el camino del aro.
André Norris y Kevin Torres tomaron las riendas de su equipo y desde el exterior comenzaron a restar puntos. Gonzalo Iglesias se unía a la fiesta anotadora para colocar el 54 a 39 en el marcador. Joe Cremo reaparecía una vez más para tranquilizar a la parroquia local con un muy buen tiro exterior, pero Balasko y Cofi rebajaban la renta hasta los doce puntos (57-45), parando el partido Diego Ocampo para evitar males mayores, consiguiendo mantener el Tizona el tipo hasta el tramo final, donde un gran triple de Juan Cofi sobre la bocina marcaba el 62-49 con el que arrancaría el último cuarto.
La tensión era patente y el Plantío se fusionó con su equipo, convirtiéndose en uno más. Rob Ukawuva desde el exterior rebajaba los once puntos de renta y las protestas de Ocampo forzaron una técnica que colocaba a los logroñeses a tan solo diez puntos (62-52).
Ukawuba y Torres asumieron la dirección del Clavijo ante un Tizona despistado por las circunstancias en unos minutos de confusión que aprovechaba el Clavijo para reducir la diferencia hasta los cinco puntos (66-61), parando el partido una vez más Diego Ocampo para buscar la solución en la pizarra.
Y la solución apareció con el dorsal número sesenta a la espalda. Papi Diene y Ayoze Alonso volvían al a pista en busca de un hilo de esperanza con un pabellón que se convirtió en una olla a presión en cada ataque visitante y que hacia vibrar los cimientos con cada canasta azulona.
La respuesta de Ayoze no tardó en llegar y con un primer triple mantenía la tranquilidad. Ukawuba erraba en la réplica y Garmine Kande machaba el aro después de recibir bajo el aro para devolver los diez puntos de diferencia por la vía rápida, en menos de un minuto de juego.
La presión de la afición interceptaba los ataques de un Rioverde Clavijo que se vio superado por los acontecimientos. Ayoze, desde el tiro adicional, continuaba aumentando la renta con cuatro puntos desde la línea de tiros libres para, segundos después, anotar otra canasta más para firmar un parcial de 10-0 para los locales con ocho puntos del tinerfeño.
Jenaro Díaz volvía a parar el partido con cuatro minutos por delante y 77 a 61 en el marcador. Sin embargo, la reacción del Clavijo no llegó. El parcial colectivo del Tizona aumentó hasta el 13-0 antes de que Andre Norris acabara con la sequía anotadora de su equipo.
El Plantío se había convertido en una fiesta, la afición se divertía con el espectáculo baloncestístico protagonizado por los dos equipos y Joe Cremo desde el exterior hacía explotar de emoción a una parroquia totalmente entregada (85-65) a falta de poco más de dos minutos para el final.
Con el partido sentenciado, los cánticos de ¡Campeones! y la consiguiente ola se dejaba ver en el polideportivo mientras el Tizona continuaba a lo suyo, disfrutando con su juego y con Garmine Kande como maestro de ceremonias machacando el aro una vez más.
Los primeros deberes de la temporada estaban hechos y Joe Cremo, con otro triple más, el tercer de la mañana para él, colocaba el 90-66 definitivo para proclamar al Tizona Universidad de Burgos como Campeón del grupo Oeste de la LEB Plata a falta de cinco jornada para acabar la liga regular, sumando así y por segunda vez esta temporada, diez triunfos consecutivos y ante el segundo clasificado.
La primera meta de la temporada alcanzada, falta ratificar el factor cancha en para el play off en las próximas jornadas. La liga aun no termina y el próximo sábado el equipo de Ocampo visitara al Talavera de Richi Úriz, un equipo complicado y que busca salvar la categoría en su pista.
DATOS DEL PARTIDO:
TIZONA UNIVERSIDAD DE BURGOS: Dídac Cuevas (9), Joe Cremo (22), Totte Alonso (8), Papi Diene (8) y Abdou Thiam (2). También jugaron: Peter Stümer (6), David Gómez (7), Garmine Kande (10), Rodrigo Seoane (3) y Ayoze Alonso (15). Entrenador: Diego Ocampo.
Eliminado: Ayoze Alonso (último cuarto).
RIOVERDE CLAVIJO: Miguel de Pablo (8), Juan Cofi (6), Javi Nicolau (3), Andre Norris (19) y Gonzalo Iglesias (5). También jugaron: Hugo Arbosa (-), Mustapha Diakhate (-), Rob Ukawuba (4), Demian Balasko (11) y Kevin Torres (10). Entrenador: Jenaro Díaz.
Eliminado: Juan Cofi (último cuarto).
Expulsados: Miguel de Pablo (por segunda antideportiva) y Jenaro Díaz (por segunda técnica).
Árbitros: López Lecuona y Presseguer Bombardo.
Parciales: 24-19 / 23-9 (47-28) / 15-21 (62-49) / 28-17 (90-66)
