El consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, ha afirmado que la Junta “quiere ajustarse a los plazos” y prevé licitar las obras del Parque Tecnológico de Burgos, el “próximo ejercicio”, con un presupuesto de 22 millones y 24 meses para su ejecución. “Queremos ajustarnos a los plazos, y esperemos que ahora sí seamos capaces de culminar este parque que tanto se merecen los burgaleses”, dijo ante las Cortes.
Carriedo, que respondió a una pregunta del procurador de Ciudadanos José Ignacio Delgado, explicó que en estos momentos la empresa adjudicataria del proyecto de adecuación del proyecto del parque, que trabaja desde agosto, tiene cinco meses para presentarlo, a lo que seguirá un tiempo de análisis de la Administración, y un mes para corregir lo que sea necesario. Aseveró que es preciso también una coordinación con Fomento, la autoridad fluvial, los ayuntamiento de Burgos y Cadeañajimeno, Patrimonio, por el Camino de Santiago, Iberdrola, Nedgia y Telefónica, para los suministros de electricidad, gas y trelecomunicaciones.
El consejero repasó los “retrasos acumulados” del proyecto y sentenció que el Ejecutivo autonómico ha puesto “como gran prioridad” de actuación esta infraestructura, para Burgos, la de mayor peso de PIB industria de la Comunidad.
Carriedo recordó que este proyecto se impulsó entre 2015 y 2017, pero que abandonó en 2018, la empresa adjudicataria. Aclaró que después se apostó por la empresa pública Tragsa pero fue recurrido por la Asociación Nacional de Empresas Constructoras, a las que dio la razón el tribunal (Tarccyl).
Así, prosiguió, tampoco pudieron concluir el contrato con Tragsa, con la sentencia de noviembre de 2019, cuando se decidió como “oportuno” adaptar el proyecto, lo que llevó a la contratación, en agosto, de la redacción, la fase actual, en la que se espera ese nuevo “proyecto técnico organizativo nuevo”.
El procurador de Ciudadanos José Ignacio Delgado se mostró convencido del “compromiso” de la Junta con un parque que “debe ser una realidad” porque “es imprescindible para el desarrollo de la ciudad y la provincia”.
Así, remarcó los puestos de trabajo que se impulsarán en sus 110 parcelas, 106 de uso tecnológico y cuatro para servicios, donde falta el 40 por ciento, con “muchas zonas por ejecutar y la necesidad de restaurar todo lo anterior”.
El procurador de la formación naranja reseñó que Burgos es “el corazón industrial del noroeste de España”, un “nexo” con la industria del País Vasco y Europa, y se encuentran “abandonados”. Agregó que la del Parque Tecnológico de Burgos es una “historia de un desencuentro y despropósito” porque los burgaleses lleva “más 15 años esperando” y exigen “compromisos y certezas, y que no haya ningún retraso más”. “No podemos aguantar más retrasos. Pocos proyectos han sufrido tantos despropósitos, tantas trabas, retrasos, calamidades e incumplimientos como el PTB”, dijo, para señalar que Burgos “padecerá siempre” las consecuencias de los 15 años de retraso del Parque Tecnológico, aunque “se levantará como siempre”.
