La Asociación Cultural El Calvario reanudó en 1991 la costumbre de realizar la escenificación con actores aficionados “por un día” en el paraje denominado El Calvario. El lugar elegido reúne todos los elementos para que el paisaje facilite un sobrecogedor escenario, cada uno de los pasos del Vía Crucis dispone de su espacio natural complementado con algunos elementos arquitectónicos que facilitan la ambientación de cada paso. Se inicia con la salida en procesión desde la parroquia de Santa Eulalia de Mérida, a golpe de la tradicional matraca se dejan las tradicionales imágenes en la ermita de La Soledad y al pie del monte El Calvario comenzará la escenificación. Degustación de los tradicionales dulces de mantecado con forma de “clavos” al finalizar el Vía Crucis.
La escenificación cuenta con unas 85 personas, todavía quedan numerosos personajes escenificados por la misma persona durante estos 26 años, aunque la lógica renovación que por edad se produce en los participantes permite nuevas incorporaciones y aseguran la continuidad en años próximos. La confección, conservación y mantenimiento de las ropas es una tarea que ocupa a las voluntarias modistas, quienes muestran año tras año su destreza con la aguja y la plancha. Directa o indirectamente todo el mundo se implica en alguna tarea y participa según sus habilidades.
Pero la Semana Santa también se escenificó de manera más sencilla el Domingo de Ramos, donde 12 jóvenes apóstoles portando las palmas acompañan en la procesión al “Mesías”. Los mismos apóstoles participan en los oficios del Jueves Santo. Llegado el Domingo de Pascua de Resurrección también participan recitando sus poesías durante la Procesión de “El Encuentro entre la Virgen y su hijo”. Unas típicas y exquisitas rosquillas se comparten entre todos los asistentes una vez finalizada la Santa Misa.
El sábado previo al Domingo de Ramos se disfrutó por segundo año del concierto y desfile de la Banda de Cornetas y Tambores de la Sangre de Cristo, pertenecientes a la iglesia de San Gil de Burgos.
Vale la pena desplazarse hasta la cercana población de Doña Santos, integrada en el municipio de Araúzo de Miel, donde su peculiar “Carrera” de Viernes Santo es vivida con fervor y también mantiene elementos propios y peculiares de su Semana Santa.
La Asociación de El Calvario organiza la actividad desde el año 1991
Unas 85 personas volverán a escenificar el Vía Crucis en Arauzo de Miel por el Viernes Santo
A partir de las 19,30 horas, con salida de la iglesia parroquial de Santa Eulalia hasta el monte de El Calvario. Al finalizar la representación, se degustan los tradicionales dulces entre los participantes. Reproducimos el artículo de Alfonso Benito Rica.
pinaresnoticias.com
12 de abril de 2017, 19:31