10 de abril de 2020, 13:16
Cien años han pasado ya, se dice pronto, desde que el 10 de abril de 1920 naciera en Palacios de la Sierra (Burgos), nuestra querida Apolonia Mediavilla Huerta.
Eran tiempos difíciles y como en cualquier casa, tanto Apolonia como toda su familia, tuvieron que trabajar mucho desde edades tempranas, para sobrevivir y salir adelante. La vida era trabajo, era supervivencia y había que arrimar el hombro, todos a una, cada uno en lo que pudiera.
Su juventud transcurrió durante la guerra y la posguerra, fueron años muy duros, sin duda, pero esta situación no impidió que formase una familia, junto con su marido Miguel, con la que disfrutó y disfruta mucho.
Apolonia es una mujer alegre y muy inquieta, siempre preocupada por su familia y pensando en que hacer. A pesar de todos los momentos duros vividos de sacrificio y trabajo, manifiesta que su vida ha sido feliz y se siente muy orgullosa de su familia. Tampoco cree tener 100 años, nos dice que “me parece mentira que tenga yo esos años” y en verdad, uno tiene la edad que siente.
La celebración de Apolonia no ha podido contar con la participación de su familia, debido al confinamiento por el coronavirus, pero tus compañeros y las trabajadoras de la Residencia para mayores “Santa Ana” de Palacios de la Sierra nos hemos volcado en celebrar como se merece tus 100 años de vida.
Cómo tú nos dices, ¡GRACIAS CORAZÓN!”, muchas gracias por darnos una lección de vida y regalarnos cada día una sonrisa.
Tus compañeros y trabajadoras “Residencia Santa Ana” de Palacios de la Sierra (Burgos).
Eran tiempos difíciles y como en cualquier casa, tanto Apolonia como toda su familia, tuvieron que trabajar mucho desde edades tempranas, para sobrevivir y salir adelante. La vida era trabajo, era supervivencia y había que arrimar el hombro, todos a una, cada uno en lo que pudiera.
Su juventud transcurrió durante la guerra y la posguerra, fueron años muy duros, sin duda, pero esta situación no impidió que formase una familia, junto con su marido Miguel, con la que disfrutó y disfruta mucho.
Apolonia es una mujer alegre y muy inquieta, siempre preocupada por su familia y pensando en que hacer. A pesar de todos los momentos duros vividos de sacrificio y trabajo, manifiesta que su vida ha sido feliz y se siente muy orgullosa de su familia. Tampoco cree tener 100 años, nos dice que “me parece mentira que tenga yo esos años” y en verdad, uno tiene la edad que siente.
La celebración de Apolonia no ha podido contar con la participación de su familia, debido al confinamiento por el coronavirus, pero tus compañeros y las trabajadoras de la Residencia para mayores “Santa Ana” de Palacios de la Sierra nos hemos volcado en celebrar como se merece tus 100 años de vida.
Cómo tú nos dices, ¡GRACIAS CORAZÓN!”, muchas gracias por darnos una lección de vida y regalarnos cada día una sonrisa.
Tus compañeros y trabajadoras “Residencia Santa Ana” de Palacios de la Sierra (Burgos).