Los campaneros de Castrillo de La Reina vuelven estos días a tañir las campanas de la iglesia parroquial en el marco de la celebración de la fiesta grande de la población, con un programa que este año ha quedado suspendido, y que únicamente mantiene las celebraciones litúrgicas.
El alcalde, Galo Contreras, comentaba en este mes de diciembre, que, tanto en el rito de hacer sonar las campanas como en la misa se mantienen las distancias de seguridad y las medidas anti covid-19.
El toque de campanas arrancó el día de Navidad, y se extiende en las jornadas del 26 y 27. En otros años, son habituales las dianas, el baile tradicional, los trajes e indumentaria, las verbenas con orquesta y, en general, los encuentros de vecinas, vecinos y gente vinculada de la población.